El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, dijo este lunes que renunciará a su cargo si se comprueba que su país compra petróleo al autodenominado Estado Islámico (EI), reseñó la agencia rusa de noticias TASS.
«No somos tan deshonestos como para comprar petróleo a los terroristas. Si se demuestra que lo hemos hecho, dejo mi puesto. Si existe alguna evidencia, que la presenten: vamos a verla», dijo Erdogan a TASS.
Durante la Cumbre del Clima que se celebra en París (Francia), el mandatario turco calificó de «amorales» las acusaciones de que su país compra petróleo al Estado Islámico.
El presidente ruso, Vladimir Putin, anunció que de acuerdo a datos que maneja su país «el crudo llega en cantidades industriales desde los lugares de extracción de petróleo controlados por el EI hasta el territorio turco».
“Rusia tiene motivos para pensar que el avión Su-24 fue derribado para asegurar el suministro de petróleo a Turquía por parte del Estado Islámico”, aseveró Putin.
«Tenemos todas las razones para suponer que la decisión sobre el derribo de nuestro avión fue dictada por el deseo de garantizar la seguridad de estas vías de suministro de petróleo al territorio de Turquía, precisamente a los puertos donde es cargado en los petroleros»,dijo el mandatario ruso.
Este domingo, el portavoz de las Fuerzas Armadas de Siria, el general Ali Mayhub, sostuvo que el Gobierno de Turquía incrementó el envío de armas y municiones al Estado Islámico, presuntamente a cambio de petróleo y antigüedades.
Ali Mayhub explicó que Turquía recibe suministros de petróleo a bajos precios, antigüedades de valor robadas de museos en Siria y otros tipos de mercancías obtenidas ilegalmente.
Agregó que el control que actualmente ejercen los grupos terroristas en la frontera entre Siria y Turquía y la ausencia de acciones contundentes por parte del Gobierno turco para evitar el tráfico de armamento y crudo han permitido a los terroristas penetrar libremente al territorio europeo.