La economía estadounidense se desaceleró en marzo pasado a causa del retroceso del ritmo de la producción, según un informe de la Reserva Federal del Banco de Chicago, divulgado este jueves.
Un indicador sobre la actividad nacional bajó a -0,29 puntos desde los -0,07 precedentes.
La entidad también atribuyó las cifras al deterioro del consumo personal, del sector de la vivienda y del mercado laboral con un nivel de desempleo de 8,2 por ciento.
De acuerdo con el Departamento de Comercio, la demanda de bienes duraderos a las fábricas de Estados Unidos disminuyó en marzo a su menor nivel en tres años.
Hubo retrocesos en casi todas las líneas de productos duraderos con la excepción de los vehículos automotores y los aparatos electrodomésticos, remarcó.
Para los analistas, el dato sugiere que la actividad fabril del país norteño perdió impulso al terminar el primer trimestre del año.
Unido a ello, siguen de cerca el comportamiento del gasto por consumo que representa el 70 por ciento del Producto Interno Bruto.
Los elevados importes de gasolina volvieron a determinar en el tercer mes del año el aumento de los precios al consumidor, situación especialmente preocupante.
Por otra parte, expertos alertaron que una sobreoferta de domicilios sin vender deprime los precios, lo cual genera problemas mayores para el sector de la vivienda, uno de los más golpeados desde el estallido de la burbuja inmobiliaria en 2007.
Según un sondeo reciente, la confianza entre los constructores de casas bajó en lo que va de abril por primera vez en siete meses, debido a las dudas de potenciales compradores a concretar las operaciones.