Las ruinas de Tusi, restos de propiedades tribales en el suroeste de China, fueron inscritas este sábado en el Patrimonio Mundial de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
El Comité del Patrimonio Mundial en su reunión del 2015, que comenzó a sesionar desde el pasado 28 de junio en Bonn, Alemania, eligió a esas estructuras históricas de las diversas etnias de Tusi para que entraran al panteón de los tesoros culturales del mundo.
Esta es la reliquia 48 que se añade a esa codiciada lista, con lo cual ahora este país milenario es el segundo con mayor cantidad de sitios inscritos en el Patrimonio Mundial de la Unesco en el mundo, detrás de Italia.
Los Tusi fueron líderes tribales reconocidos como oficiales imperiales durante las dinastías Yuan (1271-1368), Ming (1368-1644) y Qing (1644-1912).
Sociólogos aseguran que el sistema de líderes tribales sirve como referencia histórica para lograr unidad en la diversidad y gobernar dentro de un contexto multinacional.