Una huelga contra la privatización de empresas ferroviarias españolas y mejoras laborales se cumplió con éxito, aseguró este sábado la Confederación General del Trabajo, que califica de abusivos los servicios mínimos decretados por las autoridades.
En cumplimiento del derecho a garantizar actividades esenciales, el ministerio de Fomento estableció servicios mínimos de 77 por ciento para trenes de alta velocidad y larga distancia y del 57 al 65 por ciento para los de vía estrecha y trayectos medios.
El paro afectó unos 250 trenes de los cinco mil programados en España, según reportes de las empresas Renfe y Adif.
El gremio aseguró que los ferroviarios dieron ejemplo de madurez y responsabilidad al apoyar la movilización por un ferrocarril público y social, frente a planes de privatización, pese a la decisión del ministerio de Fomento de mantener la mayor parte del servicio.
Un comunicado de la central sindical recordó que el paro de 23 horas se realizó también en demanda de nuevos ingresos sin precariedad laboral, incrementos salariales desde 2015 y la devolución de una paga extraordinaria retenida de diciembre de 2012.