Al menos tres personas han perdido la vida y otras 60 han resultado heridas tras los disturbios registrados el jueves en la ciudad de Uagadugú, capital de Burkina Faso, nación donde las fuerzas militares declararon un golpe de Estado al gobierno de transición democrática instaurado hace un año.
Testigos entrevistado por agencias internacionales indican que grupos militares, pertenecientes a la guardia presidencial, han disparado contra grupos de protestantes que salieron a las calles a rechazar los últimos acontecimientos.
Un portavoz militar ha informado sobre la instauración de un toque de queda desde las 19:00 hasta las 06:00 horas locales «en todo el territorio nacional». Destacó el cierra de las fronteras terrestres, marítimas y aéreas «hasta nuevo aviso».
El líder militar, general Gilbert Diendéré, ex jefe del Estado Mayor aseguró que el presidente del Gobierno transitorio, Michel Kafando, y su primer ministro se encuentran “bien” y “serán liberados”.
RECHAZO INTERNACIONAL
El secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki Moon, rechazó el golpe de Estado en Burkina Faso y exigió, a través de un comunicado, la liberación de las autoridades; llamado al que se han sumado la Unión Africana, la Unión Europea, Marruecos, Francia y Alemania. Asimismo pidió a los militares la contención y el respeto pleno a los derechos humanos de los civiles.