El italiano Massimo Rossi, bicampeón mundial de motonáutica, murió al accidentarse durante una carrera en la ciudad alemana de Traben-Trarbach. Rossi, de 24 años, salió despedido de su lancha e impactó contra un árbol en la orilla del río Mosela, en una prueba de la categoría de 350 centímetros cúbicos.
El presidente de la Federación Italiana de Motonáutica (UIM), Vincenzo Iaconianni, había advertido que la pista en el río Mosela era demasiado estrecha y peligrosa para los pilotos. «Esto es lo peor que me podía imaginar», se limitó a señalar el presidente de la Federación alemana, Wilfried Röcker.
Rossi, que fue campeón mundial en 250 y 350cm cúbicos y corría con licencia alemana, tenía puesto su casco, pero eso no impidió su muerte.
Se une a pilotos de motonáutica como Stefano Casiraghi y el exF1 Didier Pironi en un deporte más que peligroso, pues sus reglamentos no obligan el uso de una cápsula de seguridad, supuestamente por el lobby de constructores.
Italia había lamentado también las muertes de Vincenzo Polli (en Abu Dhabi) y de Paolo Zantelli y en su país se mató el sudafricano Anton Van Heerden en 1997.
Pero Italia, de reglamento más severo respecto del uso del collar de seguridad Hans, tiene una fuerte polémica con la UIM, menos exigente. Además, un circuito tan estrecho como el del río Mosella no hubiese sido autorizado para la competencia en Italia, afirman analistas de ese país.