Museo de Ciencias acumula más de 150 mil piezas

Además la sede de la institución es una joya arquitectónica diseñada por Carlos Raúl Villanueva

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Aunque fundado en octubre de 1875, este mes de septiembre se cumplen 27 de la declaratoria del Museo de Ciencias (MUCI), como Patrimonio Histórico Nacional, una acción que reconoce la diversidad y riqueza de sus múltiples colecciones, un acervo nacional constituido por unas 150 mil piezas, aproximadamente, distribuidas en diversas órdenes de clasificación.

Además del conglomerado de piezas custodiadas y preservadas en este espacio para la promoción y divulgación del conocimiento científico, su propia sede, una belleza arquitectónica icónica de la ciudad de Caracas, también le otorgan un gran valor patrimonial a este museo, un tesoro y un oasis de nuestro país en el que se fusionan la naturaleza con el arte de dos maestros: la arquitectura neoclásica y elementos decorativos art deco de Carlos Raúl Villanueva con la estética plástica de Francisco Narváez.

Las colecciones del MUCI son diversas, variadas y profusas, conforman un patrimonio en áreas del saber como antropología física, arqueología, etnografía, herpetología, ictología, invertebrados, mineralogía, ornitología, paleontología y teriología entre otras disciplinas científicas. El MUCI resguarda, conserva y exhibe tanto animales como reptiles, mamíferos e insectos, entre otros, como huesos, cestería, cerámica, minerales y muchas piezas más.

En el MUCI se destaca la colección de paleontología con fósiles que propone un viaje en el tiempo a millones de años atrás, para apreciar, entre otras cosas, la megafauna que existió en el espacio geográfico que hoy conocemos como el estado Falcón, o a conocer a Uruma, la tortuga gigante, al tigre dientes de sable, al purussauros o género extinto de cocodrilo de enormes dimensiones.

Los dioramas africanos y de Los Llanos son otras piezas de gran valor en este museo científico. El diorama africano fue realizado por Imberman -Nicky Imber – (fotógrafo, escultor y pintor), de origen judío nació en Viena, Austria, en 1920, era de ascendencia judía y tomó las fotografías en Kenia, África, en las cuales se inspiró para hacer el mural. Estos dioramas y la fauna taxidermizada dan a conocer la importancia y el valor de la biodiversidad.

T/ Prensa FMN
F/ Archivo CO
Caracas