Artículo de Juan Barreto C.| Apuesta por los movimientos (Opinión)

Las luchas sociopolíticas de hoy se instalan intersticialmente en todas las prácticas, intervienen todas las tramas discursivas, se juegan en el desmontaje de los dispositivos de intersubjetividad. Ello indica que los paradigmas culturales tienen un peso creciente, no solo en las demandas de los nuevos agentes sociales, sino en la construcción de la nueva socialidad que está anunciando la emergencia de otra civilización.

Las nuevas formas de gestión política tienen que conectar con la naturaleza de esta nueva socialidad. Los formatos organizativos no marchan solos (no son ni universales, ni neutros). Cada forma organizacional tiene una relación muy estrecha con la gente de que se trata y con los propósitos que se postulan.

Por ello resulta tan evidente que los sistemas de partido corresponden al ideario de la democracia liberal que está en los tuétanos de la modernidad política (incluida la izquierda electoral en esta cuenta).

De igual manera, la apuesta por los movimientos (por el movimiento mismo) por la red de redes, implica otra mirada de la acción, otra manera de entender los cambios, otra forma de gestionar la concertación, otra valoración de los contenidos de las nuevas prácticas y discursos.

La propensión burocrática está presente en todo tipo de organización. No hay una receta que permita derrotarla en cualquier lado por pura voluntad. En buena medida porque con en el tiempo esta enfermedad se hizo parte de la cultura, se integró a un sentido común muy arraigado y por ello constituye un tipo de mentalidad muy difícil de erradicar.

La batalla hay que librarla en varios frentes: en el terreno de las mentalidades, en el terreno de la cultura organizacional y en el campo de las relaciones directas con la gente.

Tanto en el terreno de las teorías organizacionales en disputa, como en el campo de las experimentaciones con procesos de distinta índole, queda claro que el espacio político emergente ha de fundarse en los desempeños de los actores, en su radical horizontalidad, en sistemas flexibles e inteligentes que resguardan la complejidad de los procesos mismos, con una alta prioridad al movimiento respecto a las formalidades procedimentales.

juanbarretoc@gmai.com
Caracas