La defensa de la verdad y visibilizar a quienes por años fueron excluidos son los objetivos fundamentales de los comunicadores populares y alternativos, quienes utilizan como puesto de comando las calles, los barrios, las plazas y, en honor a esa labor, también se les rinde tributo este 27 de junio, Día Nacional del Periodista.
Como bien se recalcó en la primera edición del Correo del Orinoco, el 27 de junio de 1818: «Somos libres, escribimos en un país libre, y no nos proponemos engañar al público», y es en sí el respeto a ese principio que estos comunicadores enfilan sus herramientas para informar.
Además de los megáfonos, hoy se utilizan todos los medios posibles: las redes sociales y las plataformas tradicionales (televisión, radio y prensa escrita), subrayó este lunes Rosa Virginia Venegas, una comunicadora popular del estado Barinas y quien se encuentra en Caracas para participar en el Congreso de la Patria, capítulo Comunicadores, espacio que tiene como fin fortalecer las plataformas comunicacionales en función de romper el cerco mediático promovido por las grandes corporaciones mediáticas del mundo.
Luis Jacobo, del Colectivo Ponte Pilas, del estado Sucre, y quien presta sus servicios como comunicador alternativo, también coincidió con Venegas, y subrayó que ese es precisamente el legado del comandante Hugo Chávez, quien empoderó al pueblo en pro de la defensa del derecho que tienen a informar y a ser informados.
En entrevista concedida este lunes al programa El Desayuno, que transmite Venezolana de Televisión, Jacobo indicó que por ello los comunicadores populares y alternativos defienden la verdad, y con ello se busca erradicar todo intento «de ataque, control y el bombardeo psicológico» perpetrado por las corporaciones mediáticas.
«El objetivo es defender la verdad, que conlleva hoy a la defensa de la patria», agregó.
También en la entrevista de este lunes, Gustavo Vargas, integrante del medio digital Proyecto Sentido Común, destacó que en ese sentido los medios populares y alternativos nacieron «para trascender a la comunicación formal» y garantizarle al pueblo su derecho a estar informado, y a que se asuma también —subrayó— como un comunicador.