“Nuestras escuelas de violencia son los hogares”, sentenció Gabriela Ramírez, defensora del Pueblo, durante un foro sobre derechos humanos que se realizó ayer en el Teatro Bolívar de Caracas.
Subrayó que de acuerdo con las leyes, “el castigo físico no está permitido como método correctivo en la crianza de los niños, es decir, la nalgada, el golpe, la bofetada, el reglazo. Y no solamente se acabó en la escuela, sino que se acabó en el hogar”.
La defensora comentó “que increíblemente muchos padres no saben que es ilegal golpear a sus hijos”.
PARA FRENAR LA VIOLENCIA
Para frenar la violencia hacia la población infantil, la Defensoría del Pueblo lleva adelante el programa del derecho al buen trato.
“Es vital comprender que el camino corto del golpe, de la nalgada nos lleva al camino largo de la violencia”, recalcó.
Dijo que en muchos hogares los niños son maltratados, descalificados, desatendidos y no son escuchados.
Hasta el año 2013 se incluyeron en el programa de divulgación del derecho al buen trato a 8.310 niños y niñas, y 3.536 adultos. Se ha desarrollado en 20 estados del país.
VENEZUELA A LA VANGUARDIA
Aseguró que Venezuela “está a la vanguardia en los temas de la niñez”, por cuanto el Estado “no es un vulnerador de los derechos”, sino la “cultura de la violencia” que afecta a niñas, niños y adolescentes.
En su intervención señaló que la Defensoría del Pueblo desarrolla varios programas en las áreas de promoción, defensa y vigilancia.
Dijo que en las escuelas los estudiantes se vulneran los derechos entre sí, a través del acoso, el asedio y la burla. Dijo que gracias al programa de defensores escolares, los alumnos aprenden a ser mediadores en los conflictos.
Hasta la fecha se ha incluido a 41 centros educativos y a 16 defensorías delegadas estadales. Un total de 1.483 niños y niñas y se conformado 41 consejos de defensoras y defensores escolares.
SEXUALIDAD SALUDABLE
Además, la defensoría desarrolla el programa de formación de púberes y adolescentes en una sexualidad saludable, placentera y responsable: “Si no trabajamos estos temas con nuestros niños y niñas de manera franca, vamos a tener una feminización de la pobreza, vamos a tener niñas madres”.
Precisó que el eje transversal del programa es el proyecto de vida de las y los adolescentes: “Hemos notado la normalización de la iniciación de la maternidad a los 15 años” porque las madres de los jóvenes también quedaron embarazadas a esa edad.
Con el programa se ofrecen opciones a los adolescentes para que puedan “hacer otras cosas”.
Hasta el año pasado se incluyeron en el programa a 4.978 personas.
Aseveró que la falta de educación sexual “hace más precoz el inicio de la vida sexual de los niños; un niño formado inicia su vida sexual muchísimo más tarde y con mayor responsabilidad”.
La Defensoría del Pueblo ha llevado el programa a 25 escuelas de 25 municipios, y ha sensibilizado a 3.865 médicos integrales comunitarios.
Sobre el plan nacional de promoción y divulgación en materia de niñez y adolescencia informó que se ha capacitado a 14.503 personas, entre 2011 y 2014: “Quien conozca, maneje y tenga en su corazón como una semilla el tema de los derechos en la niñez, es nuestro mejor aliado”.