El canciller iraní, Mohammad Javad Zarif, reconoció este lunes que existen aún algunas discrepancias en las negociaciones nucleares, y pidió desde Viena rezar por un «resultado aconsejable» en las tratativas, que transcurren en un ambiente de optimismo.
Zarif se encuentra en la capital de Austria al frente de la delegación de Irán en las conversaciones con el Grupo 5+1 (los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania), en los últimos días de diálogo antes de que mañana expire el nuevo plazo fijado para llegar a un acuerdo.
El titular persa habló después de participar en una ceremonia musulmana en el Centro Islámico Imán Ali, de Viena, y pidió a los feligreses allí congregados orar por «un resultado aconsejable» en las pláticas, porque -dijo- tratamos de eliminar algunos malentendidos que persisten.
Al respecto, el ministro de Relaciones Exteriores llamó a que las plegarias de los musulmanes en este mes de Ramadán favorezcan un desenlace que satisfaga los intereses de la nación iraní, los musulmanes y el Islam, en general.
Señaló que el desenlace de las conversaciones, ahora centradas en la redacción del texto del acuerdo sobre el programa atómico iraní, todavía no es definitivo porque «hay aún algunos desacuerdos sobre ciertos temas».
Zarif se mantiene en Viena junto con el jefe de la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI), Alí-Akbar Salehi, y el ayudante especial del presidente Hassan Rouhani, Hossein Fereydoun, enviado para que viabilice eventuales consultas en la recta final de la negociación con el G5+1.
El levantamiento de las sanciones económicas impuestas por Occidente, que la república islámica desea sea total y simultáneo a la entrada en vigor del eventual acuerdo, es uno de los puntos controversiales en las discusiones.
Asimismo, Teherán rechaza presiones de Estados Unidos, Francia, Gran Bretaña y Alemania para que permita a inspectores foráneos visitar instalaciones militares iraníes y entrevistar a los científicos nucleares.
La prensa iraní citó declaraciones desde Austria del canciller chino, Wang Yi, quien destacó hoy que las partes están a punto de sellar el Plan de Acción Conjunta Global, como también se conoce el arreglo, aunque coincidió con Zarif en que existen temas relevantes sin solucionar.
Wang dijo creer en que se pueda hallar una solución aceptable para un pacto definitivo que cierre 12 años de disputas de la república islámica con Occidente por sospechas de que persigue hacerse con el arma atómica.
Lo que importa hoy y mañana es que todas las partes, especialmente Estados Unidos e Irán, adopten las decisiones finales tan rápido como sea posible, opinó el titular asiático, mientras su homólogo británico, Philip Hammond, llegó este lunes a Viena para unirse al maratón de reuniones.
Zarif dialogó ayer con el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, y prevé hacer lo mismo hoy con sus pares alemán, británico y ruso, luego de que los contactos del fin de semana permitieron a Teherán aseverar que nunca antes se había estado tan cerca de un acuerdo nuclear.