Ni a corto ni a mediano plazo se vislumbra en Venezuela una oposición confiable y respetuosa de las instituciones del país y de la democracia, señaló este domingo el periodista y politólogo venezolano José Vicente Rangel, quien agregó que para ese fin necesario debe de surgir un liderazgo de otra generación menos impregnada de antivalores.
Recalcó que las figuras de la oposición actual se sigue encaminando por las mismas aventuras del pasado reciente. «Vuelven con la misma política, envuelta en el odio de clase que los mueve siempre, y seguramente cosecharán el mismo fracaso».
Rangel mencionó que actualmente esos líderes mantienen una campaña contra el sistema democrático y contra las instituciones del país, y en el que participan poderosos intereses extranjeros, medios de comunicación y algunos grupos empresariales. «Un aspecto que se manifiesta en la oposición desde que perdió el gobierno en las elecciones de 1998, cuando Hugo Cháves se impuso ampliamente y enterró el puntofijismo».
«Ese aspecto es una conducta repetitiva de los actuales dirigentes del sector, acciones que siempre los conduce a la búsqueda de atajos», y que pese a que estas acciones siempre los ha conducido al fracaso no han sido disuadidos ni los ha llevado a recapacitar ni a formular autocríticas al respecto, agregó Ragel, en su programa José Vicente Hoy, transmitido por Televen.
«Es lo que explica que a más de una década de la aventura golpista del 11 de abril (2002) y del colosal fracaso de la huelga general y de la industria petrolera, los responsables de tales hechos sigan aferrados a tan insólita estrategia contra del orden democrártico y del orden constitucional».
El discurso desestabilizador y los llamados a derrocar el gobierno legítimo con ayuda de poderes imperiales ha sido una constante en estos últimos 15 años, denunció Rangel.
«Se empeñan en pedir ayudas imperiales, con lo cual renuncia a todo sentimiento patria; reviven la guarimbas con la pretensión de repetir el cuadro golpista que llevó Pedro Carmona a Miraflores, y busca militares en los cuarteles, pero como no los consiguen y se ensaña contra la Fuerza Armada Nacional Bolivariana0», agregó.
Señaló que se mantienen las campañas del rumor, del lenguaje descalificador y recurren a los expedientes de atentar contra la moneda y el sistema financiero, tal y como lo hicieron en el pasado cuando privaron a las familias venezolanas de las navidades y del derecho al disfrute de la temporada de béisbol.
«¿Cuándo tendrá Venezuela una oposición confiable, democrática y respetuosa de la institucionalidad democrática?», se preguntó, al señalar que «por ahora no se vislumbra esa posibilidad a corto o mediano plazo».
Para lograrlo, indicó, «tendría que asumir la dirección otro tipo de liderazgo, otra generación menos impregnada de antivalores».