El periodista y analista político, José Vicente Rangel, señaló este domingo que la ofensiva que se intensifica a diario para acabar con la democracia venezolana y la estabilidad del país, está reflejada en un complot global que tiene dos vertientes, una liderada por sectores de la derecha venezolana, partidarios de la violencia y la ruptura del orden constitucional, y la otra que está atrincherada por el imperialismo norteamericano que cuenta con abundantes recursos económicos, apoyo político y mediático.
«En el fondo de esta campaña el blanco no es solo el Gobierno porque se ha demostrado por fuentes confiables e inteligencia que lo que viene ocurriendo forma parte de una conjura global en contra del país», dijo durante su programa dominical José Vicente Hoy, transmitido por Televen.
Sostuvo que esta campaña desestabilizadora tiene como finalidad tumbar al Gobierno y desmantelar la nación.
Durante su intervención, exaltó que lo que se plantea en la nación tiene mucha similitud con el formato aplicado contra los países de Siria, Irak y Libia donde se han plasmado acciones terroristas que terminaron derrocando gobiernos y desmantelando al Estado.
Manifestó que en el caso de Venezuela apenas ocurre un hecho, «de inmediato es potenciado y lanzado hacia afuera, y se moviliza todo un aparato detractor del que forman parte artistas, gobernantes, parlamentarios y muchos de ellos sin conocimiento alguno de lo que sucede en Venezuela y muchos que ni siquiera saben donde queda el país».
El periodista lamentó el tratamiento de la información que dan grandes empresas nacionales e internacionales privadas así como personas inescrupulosas sobre la realidad de Venezuela. «Tal es el caso de los Derechos Humanos. Los actores o herederos de aquellos que practicaron lo más abominables métodos de represión contra el ser humano, tortura y desaparición y en contra de todos los que manifestaban discrepancia contra los gobiernos», recordó Rangel.
Al respecto agregó: «Las ONG’s, algunas de ellas dirigidas por auténticos mercenarios, lideran hoy la ofensiva contra Venezuela y elevan su voz en organismos internacionales. Prueba de ello es lo que ocurrió en Ginebra en la ONU, una verdadera infamia contra un gobierno respetuoso de los Derechos Humanos».