Considera que el Gobierno Bolivariano ha avanzado positivamente|Pablo Fernández: Las armas deben cambiarse por oportunidades de vida

Ningún gobierno en Venezuela se dedicó a batallar contra la inseguridad y la violencia de manera estructural como lo hizo el comandante Hugo Chávez y como lo hace ahora el Gobierno Bolivariano, aseguró el exsecretario técnico de la Comisión Presidencial para el Control de Armas, Municiones y Desarme, Pablo Fernández.

Dentro de esa política estructural, contenida en la Gran Misión a Toda Vida Venezuela, se encuentra el desarme, elemento fundamental -de acuerdo con Fernández- para disminuir los índices de violencia en el territorio nacional.

El equipo del Correo del Orinoco entrevistó a este luchador y defensor de los derechos humanos. La entrevista se centró principalmente en el desarme de la población venezolana, especialmente en las y los jóvenes.

Fernández señaló que más de 75% de las y los jóvenes “son los que matan y son los que mueren, son las víctimas y los victimarios”. Por eso, destacó, «las instituciones tienen el deber de seguir impulsando el desarme, la política de desarme no se puede adormecer, se tiene que redoblar el paso, ahí nos toca rodilla en tierra desde la actividad social».

Ratificó: “La generación de condiciones de vida dignas es fundamental para erradicar la violencia en los jóvenes”.

ARMAS POR OPORTUNIDADES

El desarme no puede verse como algo meramente instrumental. Fernández dijo que es importante fortalecer el canje de armas de fuego, que mayormente están en manos de jóvenes entre 15 y 25 años de edad.

«Un canje por una oportunidad de vida», sentenció el activista en derechos humanos. Relató qué durante el trabajo de la comisión, un grupo de jóvenes de Petare decidió entregar sus armas de fuego de manera voluntaria, «y a cambio pidieron poder terminar de estudiar, sacar el bachillerato y tener una posibilidad de un trabajo digno”.

El arma de fuego, insistió, no es únicamente un componente instrumental. “El arma es un elemento de identidad, masculinidad. Se cree que al tener un arma se está protegido, se es más fuerte”, agregó el especialista.

El desarme forma parte del primer vértice de la Gran Misión A Toda Vida Venezuela: la prevención y la convivencia solidaria. Fernández reiteró que el desarme es fundamental para enfrentar la violencia, y refirió que las armas de fuego están presentes en más de 95% de los homicidios que se cometen en el territorio nacional.

REGISTRO CONFIABLE

La venta de armas es otro tema relevante dentro de la Gran Misión A Toda Vida Venezuela. Afortunadamente, destacó Fernández, el mercado ilegal de armas en el país ha sido combatido con fortaleza por el Gobierno Nacional.

“El mercado ilegal de armas venezolano no es tan gigantesco. Diversos estudios demuestran que cuando se vendían más armas había más homicidios”, resaltó.

Fernández calificó de ambiguos los registros de armas que ingresan al país y que se venden a la población civil autorizada.

“Toda la lógica estructurada de la comercialización de las armas es muy endeble y muy poco confiable. Una de las exigencias que quedó planteada en la comisión presidencial, y que ahora debería cumplirse a partir de la aprobación de la ley (Ley para el Desarme), es que el órgano rector en esta materia, que es la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, se ponga las pilas con todo lo que sea la producción de registros de calidad, con actualización constante, auditables”, sentenció.

Con absoluta responsabilidad, el exintegrante de la comisión presidencial señaló que el Estado debe saber quién tiene las armas, cuándo y dónde la adquirió, cuál es el historial del arma de fuego adquirida, “todo bajo la lógica de la colaboración entre poderes e intrapoderes”.

Dijo que debe existir la posibilidad de que ese registro sea compartido en distintos niveles y con otros órganos del Poder Ejecutivo.

“La comisión entregó una propuesta de ley que tenía un enfoque, y era el trabajo articulado, de la integralidad del trabajo del Estado para lograr mayor respuesta. Ese enfoque no quedó reflejado en la ley”, señaló Fernández.

“LA LUCHA CONTRA LA CORRUPCIÓN”

Para el exintegrante de la comisión presidencial para el desarme, la lucha contra la corrupción que ha emprendido el presidente de la República, Nicolás Maduro, es propicia es este momento de batalla contra la inseguridad.

Indicó Fernández la guerra contra la corrupción debe tocar el ámbito policial, es indispensable que esta batalla llegue a los organismos policiales del territorio nacional.

Avanzar en el desarme compulsivo a través de la acción policial no es suficiente, la lucha frontal contra la corrupción también es importante para combatir la violencia.

La lucha frontal contra el flagelo de la corrupción “debe llegar a los penales, también debe empezar por casa, por los organismos policiales y componentes”.

MÁS DE 300 MIL ARMAS DESTRUIDAS

En 2003 comenzó la destrucción de armas en Venezuela. Desde esa fecha hasta hoy se han sacado de las calles 350 mil armas de fuego

Fernández informó que desde los años 1980 hasta 2011 ingresaron al país 600 mil armas de fuego a través del mercado legal.

El exsecretario técnico de la comisión presidencial para el desarme calificó de asertiva la política de paz que promueve el jefe del Estado, Nicolás Maduro.

Sobre este tema felicitó la iniciativa de la construcción de canchas de paz, que a su juicio no solamente alejan a la juventud del ocio y de los hábitos violentos, sino que serán espacios para el encuentro de toda la comunidad.

“El desarme no puede verse como un mecanismo para recoger armas, sino que hay que ir a lo que está detrás del desarme, es ir a la raíz”, expresó.

La idea es que los jóvenes se sientan seguros de canjear el arma porque con el intercambio recibirán una mejor condición de vida. “Tiene que ser un canje transformador, no es un canje por dinero, tiene que ser un canje que me permita desarrollar un proyecto de vida”, agregó.

Fernández aseveró que el desarme debe venir acompañado con la Gran Misión Saber y Trabajo, con las misiones educativas, con propuestas que beneficien a la ciudadana o ciudadano que está decidiendo abandonar la violencia.

“Muchos leguleyos y encumbrados opositores se burlaban. Muchos jóvenes se sumaron al llamado del presidente Hugo Chávez” para entregar las armas.

El activista de derechos humanos recordó que en este proceso surgió un colectivo llamado El hampa quiere cambiar, son jóvenes que decidieron cambiar y organizarse. “Este fenómeno se comienza a convertir en algo viral, se comienza a repetir”, expresó.

Resaltó que quienes critican el desarme se alejan de la propuesta de vida y paz que lideró Hugo Chávez y que hoy promueve el mandatario Nicolás Maduro.

“Le hace mucho daño a una Revolución que, nosotros concebimos como una Revolución socialista y humanista, el valor de la vida, del ser humano y el enfoque que ha tenido esta revolución de inclusión sea desdeñado por discursos trasnochados, prehistóricos, que salen de las peores cavernas del fascismo”, sentenció.

T/ Nancy Mastronardi
F/ Joel Aranguren