Intevep, filial de investigación de Petróleos de Venezuela, S.A. (PDVSA) en coordinación con la Compañía Anónima Venezolana de Industrias Militares (CAVIM), realizó una demostración de las facilidades que ofrece un Vehículo Aéreo Remotamente Pilotado (VARP) para labores de vigilancia y control de la estatal petrolera. En esta oportunidad la prueba se realizó específicamente en las instalaciones de PDVSA Gas, ubicadas en Campo Bare, en el sur del estado Anzoátegui.
La demostración realizada tuvo como objetivo principal mostrar las bondades del sistema para labores de vigilancia de oleoductos, gasoductos, tuberías e instalaciones petroleras en general.
Durante varios días, los VARP sobrevolaron las instalaciones de PDVSA Gas. Una vez en el aire, el avión pasó por los puntos que se establecieron en el plan de vuelo, captando fotos y videos en tiempo real, es decir, información georeferenciada que permite armar un mosaico fotográfico a fin de obtener una visión global de la zona.
Los VARP están conformados por una catapulta a través de la cual se genera la velocidad inicial, una estación móvil para el control de aeronave mediante una señal, así como el vehículo aéreo no tripulado que contiene la carga útil del sistema, es decir cámaras de video y fotografía.
El avión tiene cuatro metros de ancho y dos metros de largo aproximadamente. En el aire, mantiene un nivel de vuelo controlado, impulsado por motores de reacción o explosión. Funciona con un motor de dos tiempos y tiene capacidad de transmisión de datos en tiempo real.
Con este tipo de desarrollos PDVSA y CAVIM, demuestran que civiles y militares, están orientados por una misma política: la independencia tecnológica de Venezuela, el país con las mayores reservas probadas de crudo del mundo.