Más de 150 funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) resguardan la seguridad y atienden a los damnificados ubicados en 59 refugios de la parroquia Sucre, al oeste de Caracas, sector que también ha sufrido los embates de las lluvias.
El director de la PNB, comisario Luis Fernández, explicó que los efectivos prestan atención a los refugios y garantizan la convivencia en estos espacios al prohibir el porte de armas y evitar la ingesta de alcohol y otras sustancias.
Destacó que este cuerpo policial trabaja mancomunadamente con la Fuerza Armada Nacional Bolivariana para coordinar las acciones de seguridad.
“Para ello hemos dotado a los funcionarios con una red de comunicación, mediante un radiotransmisor, 35 patrullas y 53 motos”, añadió.
Sobre la atención de la PNB a las familias en riesgo, Fernández especificó que han sido evacuadas 4 mil familias, es decir 16 mil 782 personas, de las zonas vulnerables.
“Debido a que no se han registrado fallecidos y a la gran cantidad de personas afectadas, podemos decir que nuestra labor ha sido un éxito, pues hemos podido garantizar la vida a estos compatriotas”, dijo.
La PNB ha prestado atención, conjuntamente con Protección Civil, en las barriadas de la carretera vieja Caracas-La Guaira y en el eje de la Cortada de Catia hasta Nuevo Horizonte, uno de los sectores más populosos de la ciudad, con gran cantidad de viviendas construidas en cerros vulnerables.
“Estamos demostrándole al pueblo que la PNB trabaja de manera directa con las comunidades para garantizar su seguridad y minimizar los riesgos. Nuestra razón de ser es el respeto por los derechos humanos y por eso hemos actuado de manera oportuna y rápida”, destacó Fernández.