La población de la región del Norte de Santander, en Colombia, rechaza la inminente arremetida militar de Estados Unidos y del Gobierno saliente de la nación neogranadina contra Venezuela, e insta a la paz. Considera que ésta es la única vía para garantizar el cese del conflicto entre ambos países y el bienestar de los dos pueblos bolivarianos.
La alcaldesa de San José de Cúcuta, María Eugenia Riascos, llama a la unidad de Colombia y Venezuela, puesto que “como pueblos debemos estar integrados por el desarrollo de ambas naciones. Nosotros tenemos la esperanza de que hoy, en la reunión de cancilleres de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), convocada para analizar la crisis entre Colombia y Venezuela, se logren soluciones”.
Venezuela y Colombia “son dos naciones hermanas, que deben permanecer enlazadas por la libertad por la que luchó Simón Bolívar; esperamos que después del 7 de agosto, cuando tome posesión el nuevo presidente, Juan Manuel Santos, se retome el diálogo entre los dos gobiernos, en beneficio de la población colombiana y venezolana”.
La mandataria local colombiana insiste en que para la población de su país es bastante preocupante la situación, pero confía en que las cosas se van a solucionar”.
Con relación al ataque de Estados Unidos, a través de Colombia contra nuestro país, dijo que es algo totalmente repudiable. “Nosotros rechazamos cualquier acción que arremeta contra la tranquilidad de Venezuela”, acotó.
APOYO A LA DECISIÓN
Las colombianas y los colombianos consultados por el Correo del Orinoco en Cúcuta expresaron su apoyo a la decisión del presidente Hugo Chávez de suspender las relaciones diplomáticas con Colombia, luego de la agresión ante la Organización de Estados Americanos (OEA).
Ángel Aguilar, quien reside en Cúcuta, pero constantemente acude a comprar los alimentos de la cesta básica a San Antonio del Táchira, asegura que las acusaciones hechas por el embajador del presidente Álvaro Uribe son un total irrespeto al pueblo de Venezuela.
“El Ejecutivo de Uribe ha estado marcado por acciones guerristas y agresivas contra países hermanos; ejemplo de ello fue la invasión al territorio ecuatoriano, y ahora busca hacer lo mismo contra Venezuela, país que históricamente ha estado unido a Colombia, desde la época independentista”, sostiene.
Este hombre, quien por más de 20 años vivió en tierras venezolanas junto a su grupo familiar, lamenta que Colombia, país que lo vio nacer hace 30 años, sea una nación manejada por el imperio de Estados Unidos.
“Es inaceptable verdaderamente lo que están haciendo contra el territorio venezolano, ya que allá hay más de 4.000.000 de colombianas y colombianos que se han desarrollado económicamente, luego de que salieron huyendo de su país natal por las constantes persecuciones de paramilitares y el narcotráfico”, señala.
Considera Aguilar que el Estado venezolano tenía que defender la dignidad de su pueblo. “Una vez más la OEA se presta para atentar contra Venezuela, lo cual es repudiable, porque debería ser un órgano garante de la verdad y no de la mentira”, resaltó. “Ahora quieren arremeter militarmente, algo que es repudiable”.
ESPERANZADOS CON UNASUR
Olga Aguilar, trabajadora informal del Parque de Santander, explica que muchos sectores de su país son atacados por el Gobierno con la excusa de luchar contra el terrorismo y el narcotráfico.
“Cientos de jóvenes inocentes han sido asesinados de una manera tan vil por el propio Ejército Nacional de Colombia; muchas personas salen huyendo por temor a ser asesinadas. Es por ello que Uribe no tiene moral para desacreditar al Gobierno de Venezuela y decir que hay grupos irregulares apoyados por esa nación”, precisó Aguilar.
Otras ciudadanas y ciudadanos del vecino país coincidieron con sus compatriotas, y alegaron que la decisión del comandante Hugo Chávez fue la más acertada para responder a los ataques del Mandatario saliente de Colombia.
EN CRISIS ECONÓMICA
El presidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) en Cúcuta, Rodolfo Mora, aseguró que la región está sumergida en una crisis económica, por lo que era necesario que el saliente presidente de Colombia, Álvaro Uribe, aprobara la emergencia económica en dicha zona.
La crisis económica en el Norte de Santander no es nueva, relata, pero se agravó por la ruptura de relaciones diplomáticas.
“Queremos que Uribe nos oiga, ya que la situación es muy grave, y no podemos esperar hasta que tome posesión el nuevo presidente Juan Manuel Santos”, aseveró.
“El sector económico está muy mal, ya que no hay que vender; por ello se ha incrementado el desempleo. Los comerciantes que no están expendiendo sus productos se ven obligados a despedir a sus trabajadores.”, sentenció.
Mora calcula que hay más de 5.000 personas desempleadas en todo el territorio de Santander; muchas de esas ciudadanas y ciudadanos son jefes de familia.
El sector empresarial, agregó, desea que los conflictos entre ambos países se solucionen.