La combustión produce sustancias cancerígenas|Lo que poco se dice de las guarimbas: La quema de cauchos es dañina para la salud

Cuando se queman cauchos se liberan gases y partículas tóxicas que se desplazan por el aire, afectando la salud de la población cercana.

Los neumáticos son compuestos de isopreno o metil butadieno, que contienen diversas sustancias como azufre, sulfato de zinc, sulfato de bario, trimetilamina, parafenilendiamina y otros sulfuros metálicos de carácter tóxico.

La combustión incompleta de cauchos produce gran cantidad de sustancias probadamente cancerígenas como algunos alquitranes, benzopirenos, dioxinas, dibenzoantracenos y metil nitrosamina.

El humo emitido contiene estas sustancias unidas a partículas de carbón muy finas, la mayoría de ellas de un diámetro por debajo de 10 micrones, tamaño capaz de atravesar los filtros naturales de nuestro sistema respiratorio, hasta llegar a los alvéolos de los pulmones. Esto constituye una exposición de muy alto riesgo para contraer enfermedades malignas. También se produce anhídrido sulfuroso que es un gas muy irritante.

Estudios científicos realizados en manifestaciones donde se usa la quema de neumáticos como señal de protesta, han probado que una persona que permanece durante 1 hora en las proximidades de estos episodios aspira en ese período el equivalente a la contaminación del aire de una ciudad durante 100 días.

En ambientes poco contaminados con estas moléculas, normalmente la capacidad depuradora de nuestro sistema respiratorio puede expulsar 99% de ellas, pero al aspirar el aire cercano a estas quemas, dicha capacidad se reduce a menos de 50%.

Esta situación expone principalmente a los manifestantes, a ocasionales transeúntes y a residentes de la zona donde se realiza la manifestación, con el agravante que algunos residentes son ancianos con afecciones respiratorias crónicas, las cuales se agudizan ante la inhalación de sustancias extrañas en el aire pudiendo desatarse crisis más o menos agudas dependiendo de la sensibilidad que estos enfermos tengan frente a los contaminantes.

Además, estas sustancias irritantes, alergénicas y cancerígenas terminan dispersándose en la zona y depositándose sobre superficies domésticas provocando contaminación de alimentos que se consumen en forma directa. Se han detectado estos elementos anormales en el aire hasta unos 150 metros de distancia del sitio de quema.

Fuente/Mpps
Foto/Archivo AVN