Ayer un grupo de empleados de la Asamblea Nacional protagonizó una manifestación pacífica a las afueras del Congreso para reclamar por las deudas que no han sido canceladas por la saliente directiva del Poder Legislativo, que actuó, a su juicio, con negligencia y mala fe contra los trabajadores de esta institución pública.
El secretario general del Sindicato de Trabajadores de la Asamblea Nacional, Carlos Arévalo, aseguró que 3 mil trabajadores se ven afectados por la deuda que dejó Henry Ramos Allup con los empleados de la Asamblea Nacional y aseveró que se mantendrán en huelga permanente hasta que la nueva directiva ofrezca una respuestas.
El sindicato de trabajadores de la Asamblea Nacional exige el pago de varias deudas que superan los 1.500.000 bolívares, además del bono hallaquero y otros beneficios contractuales que fueron irrespetados por la gestión de Allup”, denunció el sindicalista Carlos Arévalo.
Aún cuando asume que la nueva directiva del Parlamento es parte de la misma coalición de partidos que ejerce la presidencia del Poder Legislativo, Arévalo espera que no se tomen represalias contra los representantes de los trabajadores, ya que no se trata de una cuestión política sino de justicia y respeto a los derechos de estos ciudadanos.
“Esperamos discutir la contratación colectiva además de beneficios como los trajes y calzados y beneficios como el tique hallaquero, el dinero de la fiesta infantil de fin de año y el de los juguetes y muchas otras deudas correspondiente al 2016”, expresó Arévalo.
MEDIADORES
Por su parte, los diputados del Gran Polo Patriótico (GPP) Pedro Carreño, Ilenia Medina, Edwin Rojas y Víctor Clark sirvieron como mediadores entre el grupo de manifestantes y las nuevas autoridades del Parlamento venezolano al recibir un pliego de denuncias sobre distintos tipos de irregularidades de la saliente directiva que perjudican a los trabajadores.
El diputado del Bloque de la Patria Víctor Clark demeritó la labor de la saliente directiva de la AN, a la calificó de fracasada. “Señor Ramos Allup, usted está saliendo por la puerta pequeña de esta Asamblea (Nacional), ni los trabajadores del Parlamento lo quieren, por mala paga, por su mala gestión; pasó un año y fracasaron”, afirmó.
Pedro Carreño manifestó que la Asamblea Nacional (AN) no fue electa para jugar al caos sino para legislar. Advirtió que en Venezuela no hay una crisis de poderes, sino un poder en crisis encabezado por una AN que busca revocar a un Gobierno legítimo.