Por María Centeno|Yo quiero ser como Doris (Opinión)

En mi juventud yo tenía una heroína a quien admiraba de lejos. Lo que era para las chicas y los chicos de ahora Justin Bieber o Messi, era para mí Doris Francia. Su nombre evocaba en mí aventuras insólitas, valientes posiciones de vida, y sobre todo un amotinamiento existencial que me hacía querer ser como ella, aún sin conocerla. Pasaron muchos años antes que pudiese ponerle cara a ese nombre legendario.

Cuando alguien nos presentó, para mí era como si me presentaran a Tania la guerrillera y a Simone de Beauvoir en una misma persona. Me propuse conocerla de verdad, y me hice su amiga. Me contó sus peripecias en la guerrilla, cuando la hicieron presa, cuando presenció la tortura de su menor hijo, pero sobre todo me impactó su independencia, su libertad ante la vida, su espíritu indomable.

Yo quisiera que las niñas y los niños de esta Venezuela nueva tengan heroínas como Doris Francia y no como Diosa Canales.

Yo quisiera que las vidas de estas mujeres que abrieron picas para que vinieran estos nuevos vientos de cambio sean lecturas en nuestras escuelas. Que nuestra juventud, y sobre todo nuestras niñas, tengan modelos a seguir diferentes a las que nos ofrece el mundo del espectáculo. Que las chiquillas de la Venezuela nueva digan «Yo quiero ser como Doris».

DORIS FRANCIA

Periodista revolucionaria ejemplo de ética profesional. Doris pago con cárcel y tortura su compromiso con la verdad.

En 1977 se le siguió juicio militar bajo la acusación de instigación a la rebelión militar por el reportaje “Los presos de la pica conquistan su libertad”, publicado en el semanario Ruptura.

Igual suerte corrió su colega Irma Barreto, quien fue acusada de «rebelión militar» por un reportaje que contaba con entrevistas a los fugados de la cárcel de La Pica, estado Monagas.

Doris Francia estuvo más de un año recluida por ser periodista, en el Internado Judicial de Tocuyito, estado Carabobo, jamás claudicó. ¡Se fue una de las imprescindibles!