Hace 116 años comenzó la Revolución Liberal Restauradora|Nacionalismo y entrega de primeras concesiones en hidrocarburos marcaron el mandato de Cipriano Castro

El 23 de mayo de 1899 Cipriano Castro, a la cabeza de 60 hombres, cruzó el Río Táchira por la región fronteriza de Cúcuta, para dar inicio a la Revolución Liberal Restauradora. Esta insurrección daría al traste con el gobierno de Ignacio Andrade, y le dría el poder al caudillo andino, quien gobernó el país hasta diciembre de 1908.

CAMPAÑA ARMADA

En su avance hacia Caracas, Castro obtiene pequeños triunfos en los sitios de Toconó, las Pilas y el Zumbador, Tovar y Valera. En Cordero, enfrenta a un fuerte contingente gubernamental, sorteando la disparidad en el número para abrirse camino hacia el Centro, no obstante estar consciente de que mucho del territorio que dejaba atrás no lo controlaba, sumando a su paso pequeños grupos. Así, de alguna manera emulaba la Campaña Adimirable de 1813 en cuanto disputar el poder, especialmente en el el Centro del país.

Su audacia contó con la inicial subestimación del adversario, que por entonces poco valoró su capacidad militar. pequeñas partidas de otros caudillos regionales desafectos al mandato de Andrade. Así, cuando arriba a Tocuyito, donde ccombate el 14 de septiembre de 1899, todavía no sobrepasaba los varios centenares de efectivos, frente a tropas experimentadas y conducidas por curtidos generales como Luciano Mendoza. Este último se plegará a Castro –quien recibió herida en el combate de Tocuyito–, escoltándole en su entrada triunfal a Caracas el 22 de octubre de 1899.

CAUDILLOS Y FLOTAS IMPERIALES

Dos conflictos armados confrontó Cipriano Castro en el curso de su mandato. El primero fue la autoproclamada Revolución Libertadora, encabezada por el banquero y general Manuel Antonio Matos, y con patrocinio de la asfaltera estadounidense The New York Company. Este movimiento, armó a muchos viejos caudillos opuestos que aspiraban suplantar al gobernante tachirense. Sin embargo, el levantamiento de los viejos caudillos termina en derrota por dos factores: uno, la fractura de su liderazgo en diciembre de 1902 a raíz del bloqueo anglo-ítalo-alemán contra Venezuela, que determina a José Manuel Hernández (el Mocho) y otros caudillos a dar su apoyo a Castro; y dos, la respuesta armada del gobierno contra los focos que se mantuvieron en armas luego de la derrota de los insurrectos en La Victoria.

En la Victorias, en noviembre de aquel año, los alazados logran reunir 14 mil hombres contra 9 mil de Cipriano Castro. Las fuerzas gubernamentales, aunque de menor número, contaron con un mejor plan de operaciones y armamento moderno, fusiles de repetición máuser y cañones Krupp de tiro rápido, que por primera vez se empleaban en Venezuela.

El segundo gran conflicto que confrontó el gobierno de Cipriano Castro fue precisamente el bloqueo naval por potencias europeas contra Venezuela –entre diciembre de 1902 y primeros meses de 1903–, con pretensiones de hacerse pagar de modo compulsivo con sus acorazados y cañones, deudas que el país no estaba en condiciones de cancelar de modo instantáneo. Al final la agresión se contuvo por mediación de EEUU

PRIMERAS CONCESIONES

Al confirmarse en las primeras décadas del siglo veinte la sospecha existente desde mediados del siglo diecinueve, respecto a que el subsuelo del territorio venezolano poseía en abundancia recursos hidrocarburíferos –especialmente el petróleo liviano de la costa oriental del Lago de Maracaibo–, la atención de la angloholandesa Shell Royal Deutsch y la estadounidense Standard Oil Co, amos del mercado petrolero mundial para entonces, viró hacia nuestro país, haciéndola objetivo prioritario.

En 1905 comenzó, en pleno mandato de Castro el otorgamiento, sin control, de concesiones para la exploración de petróleo en Venezuela. Para ese tiempo, la demanda del oro negro sustituía al carbón como principal energía de la industria, y su derivado la gasolina, resultaba indispensable para la movilidad de vehículos automotores, rama que se iniciaba en Francia y EEUU.

¿Desconocimiento de Cipriano Castro de las consecuencias de un política sin control en materia de concesiones? Pudo suceder, por cuanto su vocación nacionalista fue indiscutible, llevándole a enemistarse con las potencias europeas en 1902 y al año siguiente con el gobierno de EEUU, con quien cortó relaciones por las pretensiones abusivas de esta última potencia en torno a reclamaciones de la “ asfaltera New York Bermúdez Company” sobre el lago de Guanoco..

En todo caso en su tajante oficio de historiador Federico Brito Figueroa reconoce su vena patriótica ante las “agresiones armadas del imperialismo, a las cuales se enfrenta con decisión el dictador Cipriano Castro, haciendo gala y exaltando un nacionalismo bárbaro y primitivo que en la práctica obstaculiza la rapaz penetración de los colonizadores contemporáneos”.

T/ Néstor Rivero
F/ Cortesía