Causando impacto ambiental y de navegación|Negocio maderero panameño reposa en profundidades de lagos

Miles de árboles reposan hoy en las profundidades del lago Gatún, la mayor reserva de agua del Canal de Panamá, situación que reduce su volumen, dificulta la navegación y emite gran cantidad de gas metano.

Sin embargo, sobre la superficie, esta madera es altamente cotizada, pues los troncos «fosilizados» se caracterizan por su dureza, además de no poseer hongos ni plagas por no encontrarse expuestos al medio ambiente.

Por ello esta madera puede ser utilizada en la decoración, arquitectura y la construcción de muebles, de ahí que en el mercado internacional el pie alcance hasta los siete dólares, refiere un reporte del diario La Estrella de Panamá.

A pesar del jugoso negocio, no fue hasta el 2007 que la Autoridad del Canal de Panamá (ACP) otorgó la primera concesión a la compañía canadiense Ardán International Group, para explotar por cinco años poco más de dos millones 859 mil hectáreas.

Pero con el tiempo, otras empresas se sumaron, como la estadounidense Hollund Industrial Marine y la canadiense Coast Eco Timber, que en 2011 ganó un permiso para extraer madera de 15 mil hectáreas de bosques sumergidos, de las 30 mil explotables que posee el lago Bayano, otro de los afluentes del Canal.

Según un artículo publicado en 2007 por El Faro, una de las revistas de la ACP, el otorgamiento de estas licencias «permite disminuir la presión de la explotación maderera en otras zonas boscosas de Panamá, además de representar una inyección de ingresos para las comunidades asentadas alrededor de la cuenca.

Añade que «facilitará el desarrollo de una industria muy pujante como el turismo ecológico, además de limpiar el Gatún ante la futura ampliación del Canal».

Aunque en las licitaciones están canceladas, el vicepresidente ejecutivo de Operaciones de la ACP, Esteban Saénz, anunció que continuarán removiendo los troncos del lecho del Gatún, pero solo en los puntos identificados para fondeaderos.

«El resto del lago mantiene el bosque sumergido intacto», aseveró.

Estudios realizados por el Instituto Smithsonian revelan que en el fondo del Gatún yacen cerca de 14 mil hectáreas de bosques húmedos del Caribe, en los que cohabitan unas 29 especies distintas de árboles como espavé, zapotillo, cativo, almendro, zorro y amargo-amargo, entre otros.

Además de este bosque sumergido del Gatún, en Panamá existen otros de importancia en los lagos Bayano y Alajuela y, en menor cantidad, en las hidroeléctricas instaladas en la provincia fronteriza de Chiriquí.