El presidente estadounidense, Donald Trump, alabó el 30 de julio la decisión de su homólogo brasileño, Jair Bolsonaro, de nombrar su hijo Eduardo como nuevo embajador de Brasil en EEUU.
«Me parece que su hijo es excepcional, es un joven brillante y maravilloso, estoy muy contento con este nombramiento», afirmó el mandatario a los periodistas en el jardín de la Casa Blanca.
«Conozco a su hijo, y probablemente por eso lo hicieron [embajador]», supuso. «No creo que sea nepotismo, porque su hijo lo ayudó mucho en la campaña», consideró además.
Decisión divisiva
A mediados de este mes, Jair Bolsonaro expresó su deseo de nombrar a su hijo y actual diputado, Eduardo, de 35 años, como embajador de Brasilia en Washington.
Ya antes del anuncio, filtraciones previas provocaron una ola de críticas no solo por parte de la oposición, sino también de numerosos diplomáticos y altos funcionarios del país. Así, el juez Marco Aurélio Mello, del Supremo Tribunal Federal, aseguró al diario O Estadão que la decisión era un «pésimo ejemplo» y podía ser calificada de «nepostismo».
No obstante, el presidente brasileño defendió el posible nombramiento y, tras afirmar que su hijo es bastante competente, formalizó la semana pasada la petición para que sea embajador en EEUU.