Nokia, el mayor fabricante de teléfonos móviles en el mundo, va a despedir a 3.500 empleados. Este es el segundo despido masivo de este año, llevada a cabo para reducir los gastos.
Stephen Elop, quien hace un año ocupó un cargo del director ejecutivo de Nokia, dijo que la compañía planea cerrar una planta en Rumania, en la ciudad de Cluj-Napoca, donde trabajan 2.200 personas ahora.
El despido también afectará a la compañía-productora de mapas digitales Navteq, que Nokia compró en 2008.
Las medidas destinadas a reducir los costos de producción en 1 millones de euros, fueron anunciadas en abril. Nokia, que durante 15 años mantiene el estatus del líder de la industria móvil, ha dado paso a sus competidores Apple y Samsung Electronics.
La empresa no ha podido expandir sus ventas en sintonía con el crecimiento del 10% que experimenta el mercado mundial de telefonía móvil. Por el contrario, sus operaciones cayeron un 20% en el tercer trimestre del año.