El Estado de Nueva Jersey, en Estados Unidos, endureció sus medidas contra las armas de fuego, obligando a registrar todo tipo de pistolas, desde las reales hasta algunas que son casi de juguete.
Cualquier arma de fuego, las paralizantes, las que rocian gas pimienta, los rifles y pistolas de aire comprimido, deberán estar registradas y estarán regidas por las mismas leyes que las armas de fuego tradicionales.
Expertos legales consideran que la medida es ridícula y escandalosa.
«Honestamente, los niños que sean acusados (por tener cierto tipos de armas) tendrán un tiempo obligatorio en la cárcel», dijo William Proetta, abogado de Nueva Jersey.
Proetta agregó que bajo la Ley Graves Act, un delito de este tipo puede derivar en una pena de prisión. «La única defensa es pedir una renuncia (de las armas) pero en caso que eso no sea concedido, inclusive los niños pueden tener cargos por delitos graves».
El abogado recordó que en Virginia se considera que juguetes como rifles o pistolas son un paso previo al uso de las armas de fuego reales en la adultez. «Pero el caso de Nueva Jersey fue mucho más allá», dijo Proetta.
La estricta Ley de Armas de Nueva Jersey considera la posesión de una pistola de balines al igual que las armas como escopetas recortadas, por lo cual es necesario presentar los número de serie de las armas. La violación de la ley puede ser penado con tres años de prisión como mínimo, además de multas muy elevadas.
En octubre pasado, por ejemplo, un hombre fue arrestado en Nueva Jersey por disparar una pistola de aire comprimido (airsoft) contra un pato de goma de juguete, en el patio de su propia casa.
Idyriss Thomas, de 22 años, fue arrestado en Glassboro, tras una serie de denuncias de vecinos.
Cuando la policía determinó que el arma no tenía licencia, Thomas fue llevado a la cárcel y acusado de posesión ilegal de un arma. Su familia debió pagar una fianza de 2.500 dólares.
«No me di cuenta que lo que tenía en mis manos provocaría los acontecimientos que sucedieron hoy», dijo Thomas a un periódico local. «Yo tenía una pistola de aire en la mano, jugaba con ella, lanzándole disparos a un patito de goma, sin lastimar a nadie».
«Los tribunales trabajarán muy de cerca en cada caso», dijo Proetta. «Pero en algunos condados usted podría llegar a enfrentar cargos graves».