Nuevo mánager del Zulia: “Ahora debemos jugar más duro que nunca”

Héctor Giménez quiere aportar a los rapaces su experiencia ganadora tigrera

Recalcó que su estilo de batear “siempre será agresivo hasta que me retire”

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Héctor Giménez sabe lo que es ganar, ya que varias coronas con Tigres de Aragua lo avalan. Una lesión lo mantuvo alejado del campo por varios días esta zafra, pero ya regresó y con las ganas de aportar para que Águilas del Zulia retomen el vuelo hacia la clasificación de esta justa 2018-19 en la LVBP: “Todavía hay tiempo, pero todos debemos jugar duro y en equipo. Tenemos un club bastante balanceado”.

“El público es bastante fuerte y exigente en el Luis Aparicio El Grande, aparte de ser un estadio difícil de batear. Sin embargo, desde que llegué a Maracaibo me esfuerzo en no conectar por el aire, ya que el viento no favorece. Si me enfoco en batear en líneas hacia el medio y las esquinas. Esto me ayuda mucho en otros campos, ya que le doy con fuerza de línea hacia los rincones”, analizó Giménez sobre su actual rutina a la hora de batear.

Recalcó que “siempre soy y seré un bateador agresivo. Es algo que no va a cambiar y lo será hasta que me retire. Y si algún día me toca enseñar lo que sé, será que los muchachos sean agresivos en el home”.

“El beisbol es algo de constancia, donde tienes que mantenerte trabajando día a día. La pelota es de ajustes sea cual sea el nivel donde juegues, sea en Grandes Ligas o en Venezuela. También debes cuidar tu físico”, reflexionó este mortífero bateador ambidiestro sobre su ya larga permanencia en la pelota rentada, que incluye 18 temporadas a los 36 años.

Orgulloso

“Sin embargo, no es fácil, ya que este año no estuve jugando afuera y me costó conseguir el ritmo ofensivo, pero la experiencia de todos estos años te da idea de las cosas que estás haciendo mal y debes trabajar para corregir. Y llego con entusiasmo al estadio todos los días a poner en práctica lo que necesito para seguir aportando al equipo”, agregó el toletero.

Le enorgullece haber podido jugar con Dodgers de Los Ángeles en su última pasantía en la gran carpa: “Trabajé fuerte y me gané el derecho a subir. Es una organización que tiene una gran historia y han pasado grandes personajes. Para encontrarse ahí hay que demostrar que puedes estar en ese nivel”.

Sabe que el físico no es igual que cuando se es joven, “las piernas no responden igual, pero la actitud positiva te ayuda, aparte de trabajar y conocer tus limitaciones. No quiero desaprovechar las oportunidades que me dan, ya sea jugando o apoyando a un muchacho en el dogout. Lo importante es que el equipo consiga las victorias”.

Sabe que el retiro del beisbol “está cerca. Hay que darle chance a promesas de la pelota. Sin embargo, estoy disfrutando el día a día y poniendo lo mejor de mí. No me preocupo de eso todavía”.

T/ Eduardo Chapellín
F/ Luis Graterol