La corrupción en el Partido Popular (PP) de España pica y se extiende. En la noche del pasado martes, fue detenido el expresidente de la provincia de Valencia, Alfonso Rus, junto a otras 23 personas, quienes están involucrados en una trama de corrupción municipal y regional.
El caso es tramitado por el juzgado de Instrucción número 18 de Valencia, la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada y la Guardia Civil, instancias que llevan a cabo la operación, en la que están inmersos los ayuntamientos de Valencia y la Generalitat, además de la Diputación de Valencia.
Hasta los momentos, 24 personas han sido detenidas y 29 son investigados, además de registros que se van practicando de forma simultánea por toda la Comunidad.
Rus fue detenido por corrupción y blanqueo.
El exgobernante por el PP, Alfonso Rus, fue capturado junto a sus más cercanos colaboradores: Emilio Llopis, exjefe de gabinete y mano derecha de Rus en la corporación valenciana, y los exvicepresidentes Juan José Medina y Máximo Caturla.
Llopis y Medina aún era asesores de los populares en la Diputación y fueron destituidos horas después de su detención.
Este martes, también fue confirmada por el diario español El Mundo, la detención de David Serra, exdiputado del PP procesado en Gürtel, en la causa que investiga la presunta financiación ilegal del partido.
Serra también fue grabado aceptando dinero procedente de una supuesta comisión.
Las autoridades también detuvieron a otros funcionarios del ayuntamiento valenciano como la secretaria, Mari Carmen García Fuster ,y la exconcejal popular, María José Alcón, quien fue dejada en libertad bajo fianza.
Sin embargo, fue acordado el embargo de sus bienes como medida cautelar y es investigada por los delitos de prevaricación administrativa, malversación de caudales públicos, tráfico de influencias, cohecho y blanqueo de capitales.
El corresponsal de Telesur en España, Vicent Montagud, informó a través de su cuenta en Twitter, que la policía investiga si la organización financiaba ilegalmente al PP.
El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy,aseguró que el escándalo de corrupción que se ha desatado en el PP «no tiene por qué causarle dificultades».