El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció hoy un congelamiento de dos años en los salarios de los empleados federales en un esfuerzo por responder a la presión política de los repúblicanos y a las crecientes preocupaciones por el presupuesto.
Según nota de prensa de la agencia noticiosa china Xinhua, el congelamiento aplica a los empleados federales estadounidenses, incluidos empleados civiles del Departamento de Defensa, y no tendrá impacto en los incrementos o en los bonos de los empleados federales.
Sin embargo, Obama advirtió que reducir demasiado el presupuesto podría retrasar la recuperación económica.
«No podemos permitirnos ninguna acción que desvíe nuestra recuperación», dijo Obama en la Casa Blanca.
Indicó que el congelamiento ahorrará 2.000 millones de dólares para lo que resta del año fiscal 2011, 28.000 millones de dólares en los próximos cinco años y más de 60.000 millones de dólares en los próximos 10 años.
El déficit federal del país fue de 1,42 billones de dólares en el año fiscal 2009 y de 1,29 billones en 2010.
Obama ya congeló los salarios de los funcionarios de más alto nivel de la Casa Blanca y de los personajes con los cargos políticos más altos. Pero el congelamiento de los salarios de todos los servidores públicos es considerada una acción muy audaz.