Gleyber Torres evitó ir al arbitraje tras pactar por un año y 6,25 millones de dólares con Yanquis de Nueva York, informó el equipo. De 25 años de edad, estaba en su primer año de elegibilidad para el proceso.
En 2021 dejó una modesta línea ofensiva de .259/.331/.366, con nueve jonrones, 51 remolcadas y .697 de OPS, en 127 desafíos. Sin embargo, su nuevo salario significa un sustancial aumento con respecto a los $4 millones que percibió la campaña anterior.
Junto con Torres, otros siete venezolanos también eludieron dirimir diferencias ante un panel de jueces y sellaron acuerdos:
El receptor de los Cerveceros de Milwaukee, Omar Narváez, firmó por $5 millones; el relevista zurdo de Filis de Filadelfia, José Alvarado, aceptó $1,9 millones; el derecho de Marlins de Miami, Elieser Hernández, firmó un contrato por $1,325 millones; el utility de Tigres de Detroit Harold Castro evitó el arbitraje por un contrato de $1,275 millones; el derecho de Rays de Tampa Bay, Yonny Chirinos, quien se encuentra en lista de lesionados de 60 días, se transó por $1,175 millones; el jardinero de Tigres de Detroit, Víctor Reyes, firmó contrato, de acuerdo con Evan Petzold, del Detroit Free Press. El monto no fue revelado, pero Reyes aspiraba $1,3 millones; y el infielder de los Mets de Nueva York, Luis Guillorme, acordó por $875.000.
El martes 22 de marzo marcó la fecha límite para que los jugadores elegibles al arbitraje llegaran a un acuerdo con sus equipos sin necesidad de una audiencia. Ahora quedan pendientes los casos de Willson Contreras (Cachorros de Chicago), que aspira ganar $8,7 millones; Jesús Aguilar (Marlins de Miami, $7,4 millones), Pablo López (Marlins de Miami, $2,5 millones), Luis Arráez (Mellizos de Minnesota, $2 millones) y Luis Torrens (Marineros de Seattle, $1,6 millones), de acuerdo con MLB Trade Rumors.
Antes, el 30 de noviembre del año pasado, el derecho Deolis Guerra, de los Atléticos de Oakland había aceptado lanzar con Atléticos de Oakland en 2021 por $815.000; en tanto que el jardinero de los Orioles de Baltimore, Anthony Santander, firmó por $3,15 millones, y Orlando Arcia acordó un contrato por dos años y $3 millones de dólares, con una opción del club por $2 millones para 2024. El otro criollo, que logró un pacto multianual que cubrió su último año de elegibilidad para el arbitraje fue el receptor Elías Díaz, tras estampar su rúbrica por tres campañas y $14,5 millones con los Rockies de Colorado, a mediados de noviembre.
Castillo reza
“¿Recuerdan esta lesión?”, citó José Castillo, apuntando un dedo hacia su mano izquierda. Es cierto. Entre todas las lesiones que han mantenido al zurdo de Padres de San Diego alejado del terreno durante las últimas tres campañas, resulta difícil llevar el registro de todas.
Castillo se perdió los últimos dos meses de la temporada del 2019 debido a problemas con el tendón del dedo medio y de la mano izquierda: “Para mí, ésa fue la peor lesión. El mundo se me vino abajo ese día”.
Ésa es la última vez que el oriundo de Valencia, estado Carabobo, se ha subido en una lomita de Grandes Ligas. No ha dejado de batallar con los problemas físicos, desde molestias en el hombro a comienzos de dicha campaña hasta haber lanzado dos tercios de inning a mediados de agosto. Luego, la campaña de Castillo terminó tan rápido como empezó. La temporada del 2020 inició con más problemas, con Castillo sufriendo molestias en la espalda. En el 2021, fue apartado temprano porque se sometió a una cirugía Tommy John en marzo.
Entre toda la incertidumbre, Padres designó a Castillo para asignación en noviembre pasado. Pero se vieron entusiasmados cuando el monticular optó por volver con un pacto de liga menor, sabiendo que puede llegar a ser un dominante zurdo desde el bullpen cuando está en salud.
Para Castillo el sentimiento es mutuo. Nunca quiso irse a otro lado: “Siento que tengo una deuda pendiente en San Diego. Me dieron la oportunidad. Tengo que reponer eso”. Hasta ahora, Castillo no ha presentado problemas en su recuperación de la cirugía Tommy John. Ha lanzado 10 sesiones del bullpen y espera enfrentar a bateadores en vivo en algún momento del mes.