Ollantay Velásquez asume la dirección musical como un paso natural en su trayectoria

Desde hace aproximadamente un mes el integrante de la fila de los primero violines de la Orquesta Sinfónica Simón Bolívar de Venezuela (Ossbv) Ollantay Velásquez dio inicio formal a su carrera como director al asumir la titularidad de la Orquesta Sinfónica Juvenil José Francisco del Castillo, agrupación regional que reúne a participantes de diversos núcleos del Sistema Nacional de Orquestas y Coros Infantiles y Juveniles en Caracas, como los de San Agustín, Baruta, La Hoyada y La Ceiba, entre otros.

A diferencia de la mayoría de los casos del Sistema que constantemente anuncia el comienzo en la dirección de músicos de muy corta edad, Velásquez llega a este rol de una manera tal vez más orgánica, como parte de un proceso de maduración que comprende una trayectoria de casi 30 años en el ambiente musical, a lo largo de la cual se desempeñó como concertino de la Orquesta Sinfónica del estado Anzoátegui, ha participado como solista, además de ser integrante de conjuntos de cámara como el ya desaparecido Cuarteto Millenium y más recientemente el aún activo Cuarteto Libertadores, con los cuales ha ofrecido conciertos en más de 20 países.

Por si esto fuera poco, gracias al Sistema, Ollantay ha vivido experiencias difíciles de igualar como, por ejemplo, sembrar la semilla del Sistema en África, además de facilitar talleres y ofrecer recitales para niñas y niños que se quedaron sin familia luego del tsunami que azotó Fukushima, en Japón, entre muchas otras.

Como integrante activo de la Ossbv, desde 1999, Velásquez no solamente ha recorrido el mundo para tocar bajo la dirección de destacados directores, sino que además, como es frecuente dentro del Sistema, le ha correspondido asumir una importante tarea en el área de la formación, especialmente en la preparación de talleres y seccionales para los equipos de cuerdas en varias orquestas infantiles y juveniles.

UNA NECESIDAD

Luego de transitar por todas estas etapas que además están muy ligadas a la dirección musical, desde hace casi tres años Ollanaty Velásquez tomó la decisión de incursionar de lleno en la preparación académica de esta disciplina de manos de la maestra Teresa Hernández Vega, encargada de la Integral de Dirección de Orquesta del Conservatorio de Música Simón Bolívar.

Para Velásquez, esta incursión en la dirección es, además de un paso natural en su carrera, una vía para satisfacer su necesidad de trasmitir a las nuevas generaciones los conocimientos compilados hasta ahora en toda su experiencia como músico.

“En el Sistema nos enseñan que a medida que vas creciendo debes trasmitir tus cocimientos a los muchachos que vienen detrás de ti. Además como solista y como concertino uno está tan cerca d ela dirección que incluso dirige ensayos cuando el director debe ausentarse por algún compromiso, entonces uno va aprendido. Pero esta vez quise asumir estudios de dirección de una manera formal, porque es como una necesidad de trasmitir a las nuevas generaciones la experiencia que tengo como músico de orquesta, como solista, como camerista. Y qué mejor manera de hacerlo que con una batuta frente a una orquesta”, manifestó Velásquez en conversación con el Correo del Orinoco.

LA PROPUESTA

Ollantay Velásquez recibe a una orquesta refrescada luego de un proceso reciente de audiciones, integrada por niñas y niños desde los 12 a los 18 años, incluyendo un pequeñín violinista de 9, con quienes pretende articular un repertorio que les permita potenciar al máximo sus capacidades técnicas e interpretativas.

En este sentido Velásquez consideró que una orquesta, sin importar su nivel, debe plantearse retos que le permitan crecer por igual, tanto del punto de vista técnico como el artístico. “No hay limitantes, el secreto está en hacer un repertorio adecuado y organizado para que los muchachos aprendan. No se trata de preparar un programa para un show, que toquen y ya. La idea es construir un repertorio que esté ajustado al nivel del grupo, pero que les exija progresivamente, con retos cada vez más exigentes”.

Para lograr estos objetivos el nuevo titular de la Sinfónica Juvenil José Francisco del Castillo se propuso preparar al menos un concierto al mes en cualquiera de los escenarios que pueda disponer, bien sea en el Centro de Acción Social por la Música de Quebrada Honda, sede artística principal del Sistema, o en otros espacios con los que la agrupación ha establecido sólidas relaciones a lo largo de más de cuatro años, como el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas (MAC) o el teatro Municipal de Caracas, entre otros.

Para el próximo de estos conciertos, que aspiran a hacer en la Sala Simón Bolívar de Quebrada Honda, están preparando la obertura de la ópera Guillermo Tell de Rossini; las obertura Caballería ligera de Franz von Suppé. Muy exigente para los metales y la Danza bacanal de Saint-Saëns, una pieza con una fuerte carga para.

“Los muchachos están respondiendo bien, hemos hecho un trabajo intensivo este mes para arrancar al 100%. Hemos hecho una serie de talleres y secciónale ne octubre para montar este repertorio y llevarlo a los mas altos niveles”, manifestó Velásquez.

PREVIAMENTE

En los últimos tres años Ollantay Velásquez ha tenido la oportunidad de ser director invitado en varias agrupaciones, entre ellas la Orquesta de Cámara Simón Bolívar, conformada por las cuerdas de la Ossbv,

Igualmente, el año pasado, Velásquez aprovechó la oportunidad de dirigir El cascanueces en una versión completa, con su respectivo ballet y sus tres horas de acción, experiencia que repetirá nuevamente este año con la Orquesta Sinfónica Juvenil de Cantaura en el teatro Alfredo Sadel de Cantaura, de Anzoátegui, su estado natal, luego de completar una gira por varias ciudades de México con la Ossbv.

REFERENTES Y ASPIRACIONES

Como es de esperarse, Ollantay Velásquez tiene como referentes de la dirección musical, principalmente, al maestro José Antonio Abreu. También menciona a Gustavo Dudamel, Diego Matheuz y Christian Vasquez, a quienes ha visto crecer como directores.

En cuanto a su aspiración a corto o mediano plazo, obviamente es convertir a la Sinfónica Juvenil José Francisco del Castillo en la mejor orquesta del país “creo que esa es la aspiración de todo director, que su agrupación sea la mejor de su país”, reconoció.

Como meta profesional en el área de la dirección aspira, en primer lugar, a tener la oportunidad de dirigir su orquesta, la Ossbv y consolidar una carrera internacional.

T/ Luis Jesús González Cova
F/ Luis Franco
Caracas