Olmo Rosario: «Cuando te sientes entre familia, las cosas salen bien»

“La química y la confianza que nos da el mánager ha sido importante. Cuando te sientes entre familia, las cosas salen bien sin tu buscarlas”, había comentado Olmo Rosario al portal LVBP.com a mediados de campaña. Ahora debe estar muy contento porque gracias a su bateo, esas «cosas» le salieron bien, ya que fue el jugador más valioso del zafra 2019-200.

Ya el utility de Águilas del Zulia se había llevado el productor del torneo, definido con base en fórmulas constituidas por estadísticas de bateo. Ahora por el voto de periodistas especializados, logró hacerse con el premio Víctor Davalillo y sin rivales cercanos, ya que sacó 38 votos de 50 posibles para el primer lugar, cuatro para el segundo y seis para el tercero. La suma de puntos dio 208, mucho más que Denis Phipps (Caribes de Anzoátegui) con 58 y Danry Vásquez (Tiburones de La Guaira) con 53. También recibieron votos para el primero el camarero Yosmany Guerra (Águilas), el jardinero René Reyes (Caribes) y el inicialista Isaías Tejeda (Leones).

Para obtenerlo, Rosario compitió casi todo el certamen por el título de bateo. Terminó con .355 de promedio y .929 de OPS. Fue líder en remolcadas con 33, hits (55) y anotadas con 40. Dio dos jonrones y alcanzó 77 bases. Es su tercera campaña en la LVBP. La primera fue en la 2016-2017 con Tiburones de La Guaira. Regresó en la 2018-2019 con Bravos de Margarita y se estableció como uno de los importados más bateadores de la liga.

NO LO PELARON

Como dato curioso, Rosario, de 39 años, en principio estaba pautado para repetir con Bravos de Margarita, pero los insulares decidieron jugar la presente zafra sin importados y esto abrió la puerta para que el conjunto rapaz contratara al quisqueyano. Y quedó demostrado que puede batear, tal como lo hace también en la Liga Mexicana de Beisbol.

Nativo de Haina, Rosario es el segundo dominicano que obtiene este galardón. El primero fue Jesús “Cacao” Valdez, en la zafra 2017-2018, perofue despojado del premio al salir positivo en pruebas de dopaje. En la historia de los rapaces ahora hay tres ganadores del MVP: Phil Stephenson lo hizo en la 1988-1989, Ernesto Mejía lo consiguió dos veces (2009-2010 y 2012-2013) y ahora el quisqueyano.

“Aunque me fue bien el año pasado eso no influye en lo colectivo. Así que esta temporada lo que se quiere es tratar de ganar el campeonato… esa son mis  metas», también comentó en noviembre del año pasado a los medios de comunicación.

Considera que por su edad se le dificulta más jugar en el infilder, pero para este casi cuarentón, “todo es trabajo, desde que llego al estadio, ya que siempre busco corregir las fallas. Trabajé mucho allá en México el bateo. Me enfocó en darle duro a la bola por el medio y los batazos saldrán”.

Mantener a su familia es el principal motivo que lo mantiene activo: “Tienes que tener ese ánimo como si tuvieras diez o doce años. También me estimula este grupo de muchachos que se te acercan a pedir consejos. Lo importante es que te escuchan y buscan aplicarlos. Es bueno, ya que tú no estás diciendo algo por decirlo, sino para que aprendan”.

“Tengo tres muchachos: uno tiene trece, otro siete y el último cuatro. Una vez que me retire quiero dedicarles tiempo a ellos. Quiero ser un coach para ellos. Quiero ser un papá. Si les gusta la pelota seré un coach para ellos (risas). Los tres juegan pelota. El de trece es flaco como lo era yo, pero sí batea y tiene buen brazo. A mí me parece que está listo… pero todavía no pienso en el retiro”, recalcó el año pasado cuando se le preguntó sobre su futuro una vez que no siguiera como activo.

PREMIOS 2019-2020

Olmo Rosario, Más Valioso

Olmo Rosario, Productor

Henry Rodríguez, Setup

Gregory Infante, Cerrador

Renny Osuna, Mánager

Denis Phipps, Regreso

Ángel Reyes, Novato

Yohan Pino, Pitcher

T/ Eduardo Chapellín
F/ Cortesía LVBP
Caracas