Embajador de China, Zhao Bentang|Confianza china impulsará el desarrollo mundial

Últimamente ha habido muchos amigos que interesan por China me suelen preguntar si la economía china va a tener un “aterrizaje forzoso”, si China va a servir de acelerador o freno para el desarrollo económico mundial? Podemos encontrar repuestas en la IV Sesión de la XII Asamblea Popular Nacional de China y la IV Sesión Plenaria del XII Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino, recién celebradas en Beijing en el mes pasado de marzo.

Los documentos de importancia aprobados en la IV Sesión de la Asamblea, como el Documento Guía del XIII Plan Quinquenal de Desarrollo Económico y Social y el Informe de Trabajo del Gobierno 2015, analizan y evalúan objetiva y profundamente el panorama de la economía china, hacen planteamiento para el desarrollo chino en los próximos 5 años, y transmiten una confianza fuerte en el desarrollo económico de parte del Gobierno y de todos los sectores sociales chinos.

En el año 2015, la economía china logró estabilidad, crecimiento y mejoramiento, y se venía manteniendo dentro de una gama apropiada. El PIB alcanzó 10,42 billones de dólares estadounidenses, lo cual se traduce en una alza de 6,9% en comparación con el año anterior y una contribución de 25% al crecimiento económico global, y nos permitió seguir siendo la segunda economía del mundo.

El comercio exterior registró 3,96 billones de USD y se mantuvo en el primer puesto en el mundo; la exportación tuvo un descenso más leve que otras economías principales y países emergentes. Los ingresos reales disponibles per cápita de la población nacional aumentaron 7,4% mientras el saldo de los depósitos bancarios de la población se incrementó en 8,5%. Se logró aumentar la producción de cereales por duodécimo año consecutivo y el alza del índice de los precios al consumidor (IPC) permaneció en un nivel relativamente bajo (1,4%). Además, se crearon 13,12 millones de trabajo en ciudades y poblados.

Los progresos se concentraron principalmente en el reajuste estructural económica. El peso del sector de servicio en el PIB subió hasta el 50,5 %, pasando así a ocupar por primera vez más de la mitad del total; la tasa de contribución del consumo al crecimiento económico alcanzó el 66,4 %; la industria de altas tecnologías y la de manufacturación de bienes de equipo mantuvieron un ritmo de crecimiento más rápido que las industrias generales; y el consumo energético por unidad del PIB bajó un 5,6 %.

La demanda de consumos de información, cultura, salud, turismo, etc. se aumentó fuertemente; la economía verde inició sus primeros pasos para lanzarse, mientras que también se aceleró la formación de nuevos puntos de crecimiento. El papel de innovación avanzó con mucha rapidez: la nueva energía motriz del desarrollo creció aceleradamente, la estrategia del desarrollo propulsado por la innovación se llevó adelante de forma sostenida, la integración del internet con los sectores tradicionales se aceleró y las industrias emergentes crecieron con rapidez.

Las actividades emprendedoras e innovadoras de las masas se desarrollaron vigorosamente, y las nuevas empresas inscritas a lo largo del año aumentaron un 21,6 %, siendo su incremento medio de 12.000 unidades al día. Las nuevas energías motrices desempeñaron un relevante papel en la estabilización del empleo y la promoción de la actualización sectorial, y están impulsando profundos cambios económicos y sociales. El desempeño económico chino con su crecimiento estable y calidad más alta permitió que China sigue siendo una fuente de crecimiento para la economía mundial.

El “XIII Plan Quinquenal”, en el cual enfocándose en las oportunidades y desafíos que enfrenta la economía china, se plantean los cinco conceptos de desarrollo tales como innovativo, coordinado, verde, abierto y compartido, entra en vigencia en el año presente. Para garantizar un ritmo medio-alto de crecimiento, China ha tomado la decisión estratégica de impulsar la reforma por el lado de la oferta, dedicándose a la tranformación desde “hacer un pastel de mayor tamaño” hacia “hacer un pastel de mejor calidad”. Al mismo tiempo de que se amplia adecuadamente la demanda general, aplicamos el mecanismo de obligación retroactiva del mercado para lograr el reajuste estructural, rectificar la asignación ineficaz de los factores de producción, mejorar la calidad del suministro, para que así desatemos el potencial del desarrollo económico.

El XIII Plan Quinquenal no solo proveerá a China de nuevas motrices para el comercio exterior, inversión extranjera y cooperación industrial, sino también traerá nuevas oportunidades para las cooperaciones chino-venezolanas y chino- latinoamericanas. China y los países de América Latina todos somos países en vías de desarrollo y economías emergentes, que comparten las mismas tareas y semejantes niveles de desarrollo, cuyas aspiraciones y metas se pueden alcanzar con fuerzas combinadas.

La profundización continua de la cooperación chino- latinoamericana ha traído y sigue trayendo beneficios tangibles a sus pueblos. Estos años, entre China y Venezuela, se ha profundizado la confianza mutua política, se han avanzado las cooperaciones sustanciales, y se han estrechado los intercambios humanos y culturales. Ambos países se enfrentan la presión exterior que presenta la “nueva normalidad” de la economía mundial y la importante tarea de transformar el modelo de la economía doméstica.

El XIII Plan Quinquenal chino y sus cinco conceptos de desarrollo corresponden a la necesidad estratégica de ambas naciones mientras que la economía productiva socialista venezolana, junto con sus 14 motores, ofrece importantes oportunidades para el acoplamiento industrial entre los países. Se ha llegado a importantes acuerdos sobre el plan de desarrollo binacional para la próxima década.

China valora la cooperación económica con Venezuela y dentro de pocos días llegará una delegación de empresarios chinos para realizar un intercambio de ideas sobre la cooperación de capacidad productiva y la construcción de Zonas Económicas Especiales, para que se desarrolle a un nivel más elevado la cooperación sustancial bilateral y que beneficie a los pueblos.

En la actualidad donde la economía mundial carece de la fuerza necesaria para recuperarse, China se encuentra frente de oportunidades y desafíos. En los 30 años pasados, cada etapa de desarrollo de la economía china estaba acompañada por grandes dificultades y sombra de sospechas, pero siempre las había vencido y logrado avanzar una y otra vez, mostrando la capacidad de fuerte resistencia y flexibilidad de China. Con el XIII Plan Quinquenal, China tiene confianza y capacidad de seguir siendo un motor para el desarrollo económico mundial y aportar importantes contribuciones positivas para la prosperidad y estabilidad global.

Texto/Zhao Bentang
Foto/Archivo