La imagen que explota en mí el presidente de Donald Trump es de alegría, por fin los personaje de la serie de televisión Los Simpson cobraron vida.
Los Simpson son la familia amarilla imaginada por Matt Groening que llega al cuarto de siglo convertida en la serie animada mas longeva de la historia. Fantaseo con que el cuento o pesadilla que este artista concibió termine por transmutarse y cobrar vida y forma real en la actual familia que habita la Casa Blanca (CB).
La serie sin duda es la mejor sátira crítica hacia la sociedad de esa nación. Me atrevo a asegurar que fácilmente estos personajes plenos de humor de la familia Simpson deben ser ampliamente superados por la realidad diaria que para horror psicopático nos regala Donald Trump con sus “Des-órdenes Presidenciales”.
Cada uno de esos Decretos, de puro absurdos, producen en todos nosotros un especie de incontrolada risa nerviosa. El estupor crece y nos lleva hasta el límite de desembocar en la dubitativa frase del “no lo puede creer”.
No solo órdenes sino actos de Gobierno que este facsímil grosero de Bart Simpson es capaz de crear, como su famosa llamada al primer ministro de Australia, Malcolm Turnbull.
Descarga su furia contra el acuerdo del expresidente Barack Obama de acoger a 1.250 refugiados que Australia tiene internados en centros en Nauru (en el Pacífico) y la isla Manus (Papúa Nueva Guinea). Decisión de Obama que Donald Simpson calificó «el peor gesto político jamás hecho” mientras grita que está «increíblemente decepcionado» con el mencionado acuerdo, según detalló otro Simpson: Sean Spicer, el vocero de la Casa Blanca.
Es mamadera de gallo fácil encontrar paralelismos entre la ficción que crea a Los Simpsons, y el mundo real de la familia Trump en la Casa Blanca.
Homero Simpson es típico adulto clasemediero escalador hijo de emigrantes que quiere obtener todo mediante la ley del “vale todo”; inconformista con su vida, se dejan llevar por sus vivezas y solo tiene objetivos trazados en su ser que le proporcionen placer y dinero rápido.
¿Será el caso de su alter ego Donald Trump?
Lo peor es que este drama y horror contra los humillados y maltratados de Trump Simpson es real xenofobia mas racismo y machismo.
Me voy a dormir, seguro tendré pesadillas con los Simpson de acá: Mauricio Macri, Michel Temer, Michelle Bachelet y Pedro Pablo Kuczynski, con el muro que sueñan levantar, sin Santos of course. ¿Qué tal?