Por Manuel López|Voz cantante, palabra empeñada (Opinión)

Después de ocho años, en la realización del XV Foro Internacional de Energía, realizado en Argel, capital de Argelia, la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) acordó congelar la producción y reducir el bombeo a partir de 2017.

En el año 2008 la organización estableció un recorte de 4,2 millones de barriles por día a partir de septiembre de ese año. Después de la crisis financiera mas grande de este siglo. Con esta decisión, el grupo vuelve a marcar la voz cantante en el mercado petrolero, una posición que la diplomacia venezolana venía reclamando.

El acuerdo fue calificado como “hecho histórico” por el ministro venezolano Eulogio Del Pino, dada su importancia para la estabilidad del mercado petrolero y recuperación de los precios.

La decisión resulta pertinente si se analiza a la luz de la tendencia de crecimiento global moderado en los últimos años que probablemente continúe tanto en Mundial 2016 y 2017. El informe de septiembre de la OPEP, pronostica que el Producto Interno Bruto (PIB) crecerá 2,9% este año y de 3,1% el próximo.

En lo que ha trascurrido de año se ha puesto de manifiesto un bajo crecimiento en Estados Unidos y Japón, mientras que Rusia y Brasil mantienen una contracción notoria. El estudio indica que la Zona Euro, el Reino Unido, China y, en cierta medida, la India tendrán también un menor crecimiento a lo previsto, tanto este año como el próximo.

Cualquier estabilización en el mercado petrolero en los próximos meses podría proporcionar un apoyo positivo a la actividad económica en general, indicó el informe de septiembre.

Una sentencia premonitoria a la luz del acuerdo de esta semana de la organización. Los miembros de la OPEP deben cumplir su palabra empeñada en Argel, en la próxima reunión ordinaria que se celebrá en Viena el 30 de noviembre de 2016, para seguir llevando la voz cantante.

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