El opositor Consejo Nacional Sirio (CNS), que opera desde el exterior, reclamó nuevamente que Estados Unidos y sus aliados le entreguen armas para derrocar al presidente de Siria, Bashar Al Assad.
Así lo declaró George Sabra, quien este sábado fue elegido titular del organismo que agrupa a opositores y mercenarios, reseñó Rusia Today.
«Necesitamos sólo una cosa para apoyar nuestro derecho a sobrevivir y protegernos a nosotros mismos: necesitamos armas, necesitamos armas», expresó el dirigente.
Sabra sucederá en la dirección del CNS a Abdulbaset Sieda, un kurdo residente en Suecia que a su vez había reemplazado en el cargo al primer líder del grupo, Burhan Ghalioun.
En los últimos meses, dentro del Consejo Nacional Siria han aumentado las diferencias y disputas, por lo cual sus aliados a escala internacional lo han criticado por su falta de capacidad de derrocar a Al Assad.
Como segundo al mando del CNS fue elegido Mohammed Farooq Taifoor, de los Hermanos Musulmanes.
El Consejo emitió también sus reservas ante un proyecto de unificación de las organizaciones opositoras sirias, mientras en Doha, Qatar, se desarrolla una reunión para lograr acuerdos entre partidarios de la caída del gobierno de Damasco.
Sabras indicó: «Comenzamos un diálogo abierto con nuestros hermanos» pero «tenemos nuestro propio punto de vista y nuestras ideas».
«El CNS es más antiguo que todas las iniciativas (…) ninguna parte puede agruparse bajo la bandera de otro», expresó el dirigente opositor.
En tanto, Ahmad Ramadan, miembro directivo del Consejo, consideró «difícil alcanzar un acuerdo» para hoy.
El CNS es financiado directamente por Estados Unidos, sus aliados europeos y las monarquías del Golfo Pérsico, con lo cual permiten las acciones violentas dentro de Siria, encabezadas por grupos mercenarios y miembros de Al Qaeda.
El Consejo es un organismo similar al conformado en Libia y que en octubre del año pasado derrocó y asesinó a Muammar Al Gaddafi con el apoyo militar de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (Otan).