Para prevenir el consumo|Organización Mundial y Panamericana de la Salud conformarán Comisión Nacional Antialcohol

La Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de Salud (OPS) estudian la posibilidad de conformar una Comisión Nacional Antialcohol, que pueda establecer reglas y realice estudios científicos necesarios para producir soluciones a la problemática que genera su consumo.

Así lo informó el presidente de la Fundación José Félix Ribas (Fundaribas), adscrita al Ministerio del Poder Popular para la Salud, Rafael Sánchez, durante el foro Bases Fisiológicas del Alcoholismo y la Adicción, efectuado recientemente en la parroquia Altagracia, en Caracas.

La actividad se realizó con la finalidad de sensibilizar a la población venezolana sobre las consecuencias negativas que genera el consumo del alcohol, refirió la Oficina Nacional Antidroga (ONA) en su portal digital.

Al respecto, Sánchez manifestó que la importancia de este tipo de actividad es estimular en la sociedad una consciencia preventiva, puesto que el alcohol constituye un problema de salud emergente.

«Es necesario atacar el problema, debido a que los accidentes de tránsito representan en Venezuela la tercera causa de muerte, producto en un 90% a 95% de la ingesta de alcohol, además de que lleva a la alteración del orden público a través de la violencia, atracos, robos y discusiones callejeras», sostuvo.

De acuerdo con Sánchez, la meta que se propuso Fundaribas para este año es intensificar campañas de sensibilización del consumo de alcohol en instituciones públicas y privadas, consejos comunales, población escolar y demás, para dar a conocer que el alcohol puede generar grandes complicaciones físicas, sociales y económicas.

Por su parte, el director de Reducción de la Demanda de la ONA, Victorio Berrios, anunció que ambos organismos (ONA y Fundaribas) se encuentran en la fase final de la creación del Sistema Público Nacional de Tratamiento para las Adicciones, con el aporte de especialistas cubanos, para que los consumidores reciban atención gratuita de manera integral.

El Sistema Público Nacional de Tratamiento para las Adicciones contará con los Centros de Orientación Familiar (COF), en un primer nivel de atención al paciente; los Centros Especializados de Prevención y Atención Integral (CEPAI), donde estarán ubicadas las unidades de desintoxicación, y las Comunidades Terapéuticas Socialistas (CTS), que contemplan la hospitalización de los pacientes durante 120 días.

Todo esto, bajo un tratamiento continuo y especializado, con un equipo multidisciplinario, que permita a los pacientes tener una recuperación participando en actividades en las áreas agraria e industrial, dependiendo de la región en que estén ubicadas las CTS, fortaleciendo con ella la inclusión social de los pacientes.

El Sistema Público Nacional de Tratamiento para las Adicciones incluirá dentro de sus alcances la atención a las adiciones comportamentales, donde no está involucrado el consumo de drogas, pero que existe una alteración del comportamiento del ser humano, quien dedica su vida a los juegos de azar, a las compras compulsivas o la ejercitación exagerada de la sexualidad, por citar algunos ejemplos.

Según Berrios, todas las adicciones deben ser concebidas como enfermedades crónicas con tendencia a las recaídas y que requieren atención multidisciplinaria adecuada, y mediante el Sistema Público Nacional de Tratamiento para las Adicciones la población podrá recibir atención necesaria para tratar cualquier adicción que afecte su vida.

La profesora de Fisiología de la Universidad Central de Venezuela Mercedes Shnell -una de los ponentes del foro-, explicó que el alcoholismo es una enfermedad de pérdida ya que un alcohólico pierde trabajo, casa, dinero, familia y pueden llegar -en casos extremos- a la indigencia.

El alcoholismo hace que las personas pierdan su capacidad cognitiva y laboral, por ende, los países lo consideran un problema de salud pública, además de ser una enfermedad incurable como la diabetes, pero que puede ser controlable.

Igualmente, Ernesto Trejo, de la Facultad de Medicina de la UCV, planteó durante su ponencia que en la medida en que la población conozca la forma como las drogas actúan en el sistema nervioso central, procederán en consecuencia para prevenir el desarrollo de la adición o ayudarán a los consumidores a dejar la adición y que puedan tener nuevamente una vida normal y útil en la sociedad.

En este sentido, el director Nacional de Tratamiento de Fundaribas, Oliver Fernández, explicó que la adicción es un proceso que se desarrolla con el tiempo.

En sus primeras etapas pueden pasar hasta inadvertidas, por la levedad de los síntomas o por la capacidad de compensación de las personas sobre las consecuencias negativas que generan los vicios en su propia vida y sus relaciones. Las personas predispuestas que se exponen al uso de la sustancia o conducta de riesgo pueden pasar esta línea y convertirse en adictas, explicó.

T/AVN