“La armonía y la alegría que se viven en el clubhouse son la clave para que el Caracas se lleve el título. Esto hace que cada uno de nosotros salga al terreno a dar más del cien por ciento. Salir al terreno a hacer lo que uno sabe hacer. El ánimo está increible”, señaló Oswaldo Arcia, jardinero de Leones del Caracas.
Por cierto y debido a dar ese extra en el terreno de juego, en el segundo juego de la gran final sufrió un percance en la ingle, por lo que los melenudos evalúan su condición día a día.
Eso sí, “pido a toda esa fanaticada del Caracas que nos siga apoyando, que todos salimos al terreno a jugar con todo para ganar esa corona”.
Sobre el éxito que ha tenido con su bateo en los últimos días, fue tajante: “Se lo debo a la confianza que me ha dado el mánager José Alguacil. También el coach de bateo Ramón Castro me dijo cuando al comienzo de temporada pasé por un mal momento, que ‘no es como se empieza, sino cómo se termina’. Y empecé a tomar las cosas con calma. Bajé la intensidad pero trabajé más fuerte”, agregó.
Un dato interesante es que en las últimas semanas, el mayor de los Arcia ha tomado muchos pasaportes, “porque ahora estoy más pasivo sin perder mi agresividad. Ahora busco el pitcheo al que le puedo hacer un buen contacto. Mantengo siempre igual en mi postura en el home. Lo que tengo es más paciencia ante los pitchers”.
También reconoce el respaldo dado por sus compañeros de equipo: “Y es el equipo completo. Todos nos aconsejamos. Si no es uno, es otro, mañana eres tú. Estamos juntos para conseguir ese título”.
Oswaldo Arcia fue el retorno de esta campaña 2022-2023: “Este premio no me agregó más porque la motivación siempre está ahí, trabajando duro cada día. Eso sí, sé que no tuve un comienzo de temporada bueno, pero en ningún momento bajé la cabeza. Sentía un compromiso con el equipo. Pude resolver”.
Este oriental acumuló 32 de 50 votos posibles al primer lugar, para sumar 190 puntos, superando a José “Cafecito” Martínez (Tigres de Aragua), que totalizó 85 unidades, y a Franklin Barreto (Tiburones de La Guaira) con 82.
Oswaldo encabezó la liga en OPS (1.137), remolques (44) y slugging (.661) y fue colíder en vuelacercas (11): “Muchos me estaban sacando (risas), pero ahorita estoy demostrando que voy a estar por muchos años más”.
Sobre su defensa que se vio muy bien en el jardín derecho, aclaró que «siempre la he tenido. Lo que pasa es que trabajé más mi físico, bajé un poco mi peso y ahora tengo más alcance de la bola».
Volverá a jugar en México este verano: “Ahí se juega una gran pelota y es un trampolín para volver al beisbol organizado de Estados Unidos”.
Nacido el nueve de mayo de 1991 en Anaco, estado Anzoátegui, este oriental debutó en las mayores durante el año 2013 con Mellizos de Minnesota, donde laboró por cuatro zafras. Sin embargo, en 2016 jugó ese mismo año con Mellizos, Tampa Bay, Miami y San Diego, Fue su campaña de despedida a los 25 años. Despachó en ese período 44 vuelacercas, anotó 103 rayitas y remolcó 131, pero su escaso contacto atentaron con su estabilidad. Prueba de ello es que bateó .235 (983-231) en 288 careos… pero se ponchó 339 veces por sólo 76 boletos: “Aprendí trabajando mucho. Ahora soy más paciente en el plato”.