Luis Rojas se retiró de las piscinas como atleta de alta competencia con sólo 30 años.Su objetivo era claro: ayudar a las futuras generaciones.
Rojas hizo la marca para formar parte del equipo que viajó a los pasados Juegos Olímpicos de Beijing 2008 en la prueba de los 50 metros estilo libre, pero un extraño suceso le pasaría que lo obligaría a dejar el mundo de la natación. Fue operado 3 meses antes de la cita olímpica y él prefirió que asistiera otro en su lugar que pudiera darle mejores frutos al país.
El oriundo de Guanare, estado Portuguesa, decidió retirarse pero no sabía lo que el destino le deparaba. Luego de su retiro se quedó solo, sin ningún tipo de ayuda de parte de los dirigentes deportivos del país, para mantenerse o tener algo de que poder vivir.
– ¿Es duro empezar de cero?
– Además de duro es triste. Luego de que uno le dio tantas alegrías y triunfos al país, me retiré y hoy nadie se acuerda que yo algún día fui 4 veces campeón Bolivariano, Suramericano, Centroamericano e implanté varios récords internacionales.
– ¿A qué te dedicas hoy en día?
– Bueno, soy vicepresidente ejecutivo de la asociación única de atletas olímpicos. A través de este proyecto buscamos mostrar todo lo que pasa un atleta, para llegar a una competencia de nivel internacional y de que tomen conciencia del protagonismo que ellos deben asumir.
– ¿Tu sueño?
– Mi sueño hoy en día es lograr todo lo que no pude como atleta, pero como dirigente deportivo. Creo que hay muchas cosas que tienen que cambiar por el beneficio de los deportistas quienes son los verdaderos protagonistas de todo lo que pasa. Quién mejor que ellos para decir qué es lo que les hace falta para rendir mejor.
– ¿Qué hace falta en el país para mejorar las condiciones físicas de los atletas?
– Definitivamente una Universidad como la de los Estados Unidos, que le dé la oportunidad a los atletas de entrenar y de estudiar, para que ellos no se vayan de nuestro país y se formen como debe ser.
– ¿Cuánto viviste en los Estados Unidos?
– Ocho años. Allá me gradué en Literatura española y Negocios. Regresé porque tuve problemas con la visa y terminé quedándome. Allá la vida no es como mucha gente piensa, allá es duro porque no conoces a nadie y los que conoces te tratan como si no le importaras. En cambio aquí las personas tienen mucho más calor y humanidad.
– ¿Danos tu opinión sobre Albert Subirats?
– (Risas)… me considero como un hermano para él. Tuve la oportunidad de verlo crecer desde que tenía 13 años y hoy puedo decir que él me ha superado como nadador. Creo que esa es la meta del maestro, que el alumno lo supere. Recuerdo que yo lo recluté para mi Universidad en Arizona. Allí le fue muy bien y hoy en día es uno de los mejores del mundo entero.
– ¿Y sobre Andreína Pinto?
– Ella es muy buena. Tiene un futuro enorme por delante, porque apenas tienen 20 años y es extraordinaria en aguas abiertas. Ademá tiene un amor muy grande por este deporte que la lleva a trabajar hasta 20 kilómetros en dos sesiones diarias
– ¿Es normal que un nadador practique 5 mil y 10 mil metros y salga como si nada?
– Sí, si hay alguien que es reconocido en el mundo por sus fuertes entrenamientos ese es Ricardo Monasterio. Te puedo dar un ejemplo. Él hacía 100 series de 100 metros de un minuto y eso no lo hace cualquier persona.
– ¿Qué opinas sobre el cambio de Ricardo Monasterio hacia las aguas abiertas?
– Él tiene muchas condiciones, creo que allí tiene muchas más oportunidades. Quizás ahora le vaya mucho mejor ya que él no ha podido explotar tanto como se esperaba de él.
– ¿Apoyas la suspensión del traje largo?
– Está bien hecho, porque eso le devuelve la esencia a la natación. Lo mejor es colocarse un traje de baño y nadar normal. Usar ese traje es como hacer trampa, porque no todos tienen el dinero para adquirirlo. Si todos tuvieran la oportunidad de usar uno fuese lo mejor.
– ¿Cuánto sacrificio hay que hacer para vivir en otro país?
– Mucho. Yo viví allá sin ayuda de nadie. Yo me había ganado una casa y un carro y me tocó venderlos para poder sobrevivir dos años allá hasta que el profesor Eduardo Álvarez me dio una ayuda significativa para ese entonces que me sirvió para terminar mi carrera allá.
– ¿Cuánto duele retirarse?
– Mucho. Es algo para lo que uno nunca se prepara y más si es como yo que aún tengo condiciones para seguir compitiendo en cualquier escenario del mundo. A veces me pongo a ver todas las cosas que me dio la natación y me dan ganas de llorar. Me embarga un sentimiento que no sé que es, pero al menos sé que lo di todo por mi país y eso nadie lo podrá cambiar.
– ¿Qué te gusta hacer?
– Enseñar, sueño con una piscina llena de niños y poderles enseñar todo lo que yo aprendí y evitar que ellos caigan en malos pasos, aunque eso es difícil porque uno no tiene el control absoluto sobre ellos. Además hace falta que los buenos entrenadores se integren al país no que trabajen para otras naciones porque si Venezuela te dio todo para que fueras grande, por qué no vas a devolverle el favor haciendo lo que te gusta.
Ficha técnica
Luis Rojas Carpena
Nació: 05-07-1979
Mide: 1,86
Peso: 94 kg
Títulos obtenidos
4 veces campeón Bolivariano
4 veces campeón Suramericano
4 veces campeón Centroamericano y del Caribe
3 medallas de bronce en Juegos Panamericanos en la misma prueba en 3 ediciones diferentes con récord nacional.