Este miércoles, fueron anunciados detalles sobre el nuevo sistema cambiario que acompaña al conjunto de acciones y componentes incluídos en la Agenda Económica Bolivariana. Al respecto, Correo del Orinoco conversó con el economista Pablo Giménez, acerca de sus implicaciones.
En primer lugar, abordamos las diferencias que tiene el nuevo esquema con respecto a los anteriores. Subraya Giménez que en primer término, se distingue porque no solamente es para la administración de las divisas, sino también para la captación. Resaltó que es sumamente relevante que PDVSA, por ejemplo, pueda colocar una parte de sus ingresos en dólares a la tasa fluctuante (Dicom), también que el 40% de las exportaciones no tradicionales puedan ser liquidados con ese tipo de cambio, ya que ello redunda en el incremento de la oferentes.
Agrega que representa un incentivo para los exportadores venezolanos, que anteriormente estaban en la obligación de vender las divisas al Banco Central de Venezuela al precio oficial. “Esto servirá para seguir impulsando las exportaciones en rubros no tradicionales”.
¿Qué ventajas tendría el tipo de cambio Dicom con respecto al sustituído Simadi?
El Banco Central de Venezuela, permanecía como el único oferente de divisas, con la caída de los precios del petróleo no había posibilidad que hubiera alguna perspectiva para que, bajo este esquema Simadi funcionara eficazmente y tuviera perspectivas.
Al cambiar los oferentes de ingresos en dólares de PDVSA y de los exportadores venezolano, se genera una situación de mayor credibilidad, aspecto que es fundamental.
¿Se puede derrotar de esta forma al dólar especulativo?
Son acciones incipientes, en la medida que se deslice el costo de la divisa, en que aumente el volumen de oferta, va a generar credibilidad, y con ello el llamado dólar especulativo va a tender a la baja y a ser menos considerado por los sujetos económicos. La gran meta es generar credibilidad.
LOS MERCADOS NO SE AUTOREGULAN
¿Es este el camino adecuado para logar el equilibrio económico en el país?
Lo planteado en el gobierno nacional es lo correcto, las divisas se deben colocar en función del desarrollo del país, Pérez Abad resaltaba en su intervención de hoy, que deben estar en concordancia con el desarrollo de los motores planteados en la Agenda Económica Bolivariana.
La única forma de alcanzar los objetivos macrosociales es con más producción y una nueva cultura de trabajo. Además de ello, el perfeccionamiento de los mecanismos de seguimiento y control. Desde la perspectiva de la oposición la solución hubiese sido la eliminación de los controles de cambio, la liberación de precios, esa es la vía del neoliberalismo. Ya tenemos reciente la experiencia de Argentina al respecto, allá se aplicó esta receta y lejos de logar estabilidad, el dólar va en alza, los precios de los productos en alza. Los mercados no se autoregulan.
¿Es demasiado rígido el sistema de divisas venezolano?
Los mercados de divisas no son ni 100% accesibles ni un 100% flexibles en ninguna parte del mundo. En el caso venezolano es necesario un conjunto de condiciones necesarias. Incluso el sistema que hemos tenido es de los que mas facilidades ha dado en varias décadas, con el tema de los cupos electrónicos, los cupos viajeros.
Las medidas de control y administración son inevitables para proteger la moneda de los países y el trabajo.