Cuando se cumplen 15 años del golpe de abril que pretendió arrebatarle el poder al Comandante Hugo Chávez y al pueblo, este martes se celebró una misa en Puente Llaguno, en Caracas, donde fueron recordadas las víctimas de la violencia de aquella tarde que tiñó de sangre las calles de la capital.
Durante la ceremonia eclesiástica el padre Numa Molina esta fecha debe ser para la siembra definitiva de la paz y del diálogo.
Sin embargo, acotó que, a quince años del 11 de Abril, grupos llenos de odio y maldad siguen creyendo que la violencia es el camino para solucionar los problemas del país.
Citando el evangelio de Juan, el Padre Numa resaltó que cuando le preguntaron a Jesús para qué había venido al mundo, éste respondió que “el ladrón no viene más que a robar, matar y destrozar, yo vine para que tengan vida y la tengan en abundancia”. En ese contexto recordó que el objetivo del mal es robar, matar y destrozar.
“Son 15 años de agresiones y pretensiones de que por medio del camino de la violencia es que se van a solucionar los problemas… No. Es a través del camino de la paz con justicia. La paz que debe arrancar del reconocimiento de la culpa de cada uno”, dijo recordando que ha sido esta la causa que ha impedido lograr el verdadero diálogo.
“Hay perdones que se tienen que pedir y que no se han pedido”, expresó, acotando que incluso desde la propia iglesia se debe pedir perdón al pueblo católico al que se le ha faltado el respeto muchas veces desde sus pastores.
“Son muchas culpas, perdones que tenemos que pedir y falta que tenemos que reconocer para que acontezca la vida”, dijo.
JUSTICIA PARA CONSTRUIR CONVIVENCIA EN PAZ
Para el sacerdote católico, hoy más que nunca debe ser una promesa del pueblo que lucha por una patria nueva y que apuesta por la vida; que desde la justicia se construya una mejor convivencia que genere paz para el país.
En este sentido pidió bajar las altanerías y arrogancias, que no dejan reconocer las fallas que hemos cometido; y pensar en recuperar la convivencia armónica en Venezuela, al que considera el país más hermoso del mundo y bendecido por Dios.
“Tenemos que ponernos de acuerdo como venezolanos para construir la paz y la justicia… Que le mostremos al mundo queremos vivir en unidad y en paz”, reflexionó.