Defensores de los derechos del pueblo palestino, realizaron una concentración para rechazar la medida que se tomó el pasado 6 de diciembre, el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump quien anunció que su Gobierno reconoce a Jerusalén como capital de Israel.
La actividad de apoyo a la causa en la estación ubicada en el Medio Oriente fue denominada “Jerusalén es de Palestina”, y tuvo como protagonistas a activistas de organizaciones sociales y políticas quienes criticaron la decisión unilateral de EEUU sobre Jerusalén que viola los derechos internacionales y ancestrales sobre ese espacio de Palestina.
La defensora de los derechos del pueblo palestino, Susana Khalil, denunció que el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, mediante una falsificación de la historia y una actitud déspota atenta contra el espíritu de paz y los derechos étnicos e históricos de un pueblo originario.
“Estamos contra la postura imperial de los EEUU cuando impone a la ciudad de Jerusalén como la capital del régimen colonial de Israel que deja en evidencia su actitud tiránica que viola la resolución 181 sobre el estatus internacional de Jerusalén que no podemos aceptar”, dijo.
Recordó que Jerusalén fue fundada 6 mil años antes de Cristo. Estamos hablando de un lugar fundado por el pueblo semita jebuseo, de donde viene la línea cananea de la sociedad palestina. No hay que confundir al antiguo pueblo israelí hebreo semita con el Israel sionista que se impuso desde Europa en 1948.
Cuando en 1948 se creó el Estado de Israel, la ciudad de Jerusalén, considerada sagrada tanto para musulmanes como para judíos, fue formalmente dividida en dos. La parte occidental quedaría bajo administración israelí, mientras que la parte oriental sería la capital del futuro Estado palestino.
Sin embargo, esto nunca se cumplió debido a las sucesivas guerras en Medio Oriente y desde 1967 -tras la Guerra de los Seis Días- Israel ocupó la región este.
“Tengo la esperanza que esta Cumbre Extraordinaria de la Organización para la Cooperación Islámica sirva para acabar con el terrorismo y reivindique los valores sagrados de los pueblos”, dijo la defensora de los derechos del pueblo palestino.
Khalil advirtió que la manifestación por la paz del pueblo palestino, que se realizaría frente a la Embajada de Estados Unidos en Venezuela, ubicada en la urbanización Colinas de Valle Arriba, en Caracas, hubo de ser suspendida debido a que se recibió información sobre un posible atentado contra esta actividad.
“En ese plan de sabotaje querían un muerto, lo cual es grave y no le vamos a dar el gusto a esos asesinos de ver correr sangre para crear una mala imagen y demonizar al pueblo venezolano que lucha por causas justas. Velamos par la vida de todos los seres humanos que íbamos a marchar”, dijo.
CÓMPLICES DEL SIONISMO
Carolus Winmmer, secretario de Asuntos Internacionales del Partido Comunista de Venezuela (PCV), aseguró que en un mundo con respeto a las leyes, los funcionarios del Gobierno de Israel habrían sido juzgado por crímenes de lesa humanidad.
El dirigente comunista aseguró que el Tribunal Internacional de La Haya y las organizaciones de defensa de derechos humanos forman parte de ese entendimiento que apoya plenamente al gobierno sionista y permite el genocidio contra el pueblo palestino.
Lamentó que que EEUU haya pasado de mediador en la causa de Palestina a parte del conflicto. “Ese anunció del presidente de EEUU, Donald Trump, de una forma previsible, provocativa y acompañado de una ola represiva contra el pueblo palestino con la intención de retrasar un acuerdo que restituya el derecho de este pueblo a sus territorios.
“Esta continua provocación quiere retrasar ese acuerdo y ese derecho del pueblo de Palestina a su territorio, y el regreso de varios millones de exiliados y refugiados palestinos que están en diferentes partes del mundo. (…). Ni siquera hay posibilidad de reencuentro entre familiares como lo prevén los acuerdos cuando se presentan estos conflictos”, dijo.