Durante un encuentro con la Comunidad del Pontificio Colegio Pío Brasileño de Roma, celebrado en Italia, el papa Francisco reclamó este sábado, la necesidad de un clero «unido, fraterno y solidario» en Brasil, ante la «escandalosa corrupción» que vive ese país.
«En este momento difícil de su historia nacional, cuando tantas personas parecen haber perdido la esperanza en un futuro mejor por los enormes problemas sociales y una escandalosa corrupción, Brasil necesita que sus curas sean señales de esperanza», defendió el papa.
No es primera vez que Francisco se refiere a este tema.
En su opinión, los brasileños «necesitan ver a un clero unido, fraterno y solidario en el que los sacerdotes afronten juntos los obstáculos sin caer en las tentaciones del protagonismo o de hacer carrera», señaló el pontífice. «Estoy seguro de que Brasil superará su crisis y confío en que vosotros actuaréis en esto como protagonistas», dijo el religioso ante estudiantes y miembros de la de la Iglesia.
En su discurso, Francisco se dirigió a ellos como «curas estudiantes» y les alertó que «esa nueva condición» puede suponer un «desequilibrio» entre los cuatro pilares que sostienen la vida de un presbítero: la dimensión espiritual, la académica, la humana y la pastoral; ya que podría tentar a las personas a hacer de los estudios un método para enriquecimiento -en todo sentido- personal.