Pdvsa en riesgo

TINTA CRUDA

POR: AFREDO CARQUEZ S.

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Hace pocos días un dirigente de la Primero Justicia habló sin tapujos sobre lo que cree debería hacerse inmediatamente en el país de hacerse la derecha venezolana con el poder político. Apenas comenzó a su intervención, con una vehemencia bastante curiosa, como si previamente se hubiese tomado unas copas, por decir lo menos, colocó sobre el tapete una vieja aspiración de los centros de poder del mundo desarrollado: la privatización de Petróleos de Venezuela.

Esa obsesión de PJ resulta coherente con su nacimiento, pues seguramente su cúpula piensa que, como fueron financiados con dinero público, gracias al aporte generosamente otorgado por la Junta Directiva de Pdvsa de la época, ellos son una especie de socios no reconocidos que tienen el derecho de decidir el destino de esa empresa que se les ha hecho tan arisca en el tiempo.

La amenaza de privatizar Pdvsa no quedó atrás tras la derrota del paro sabotaje de comienzos de siglo ni tampoco ha sido anulada con cada revés electoral sufrido por la oposición desde 1998 hasta la fecha. Esta existe y existirá en los planes de los capitales transnacionales y sus gobiernos del mundo industrializado y, por supuesto, en sus franquicias criollas tales como PJ o Voluntad Popular.

Esto será así mientras no se corrija el vacío que con respecto a ese tema quedó en la Constitución Nacional de 1999. Se ha advertido una y otra vez que el Artículo 303 de la Carta Magna vigente debe ser perfeccionado, pues aunque en el mismo se garantiza que “el Estado conservará la totalidad de las acciones de Petróleos de Venezuela S.A.”, esta compañía no es la que produce ni petróleo ni gas ni lubricantes ni gasolina o diesel.

Pdvsa es la casa matriz, es decir, la organización que agrupa las verdaderas joyas de la corona. Esas son otras, son sus filiales, y hacia estas apunta la ambición de quienes en medio de la grave crisis que atravesamos ven su oportunidad de oro para ponerle la mano, a precio de ganga, las compañías nacionales que tienen el mandato de explotar y comercializar nuestros recursos naturales.

La Asamblea Nacional Constituyente debería informarle a los venezolanos si este tema se ha discutido o no en sus sesiones. También sería provechoso que nos dijera cuáles son las posiciones que acerca de este asunto se han presentado y cuáles las conclusiones a las que se ha llegado acerca de tan importante materia.

alfredo.carquez@gmail.com
Caracas