Venezuela participó en II Reunión Anual del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura en Seúl, Corea del Sur
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Una delegación venezolana evaluó con el presidente de la empresa Hyundai, Soo-Hyun Jung, el estado de avance del Proyecto de Conversión Profunda de la Refinería de Puerto La Cruz, en el estado Anzoátegui.
La mesa de trabajo por parte de la delegación venezolana que estuvo presidida por el vicepresidente de Finanzas de Petróleos de Venezuela (Pdvsa), Simón Zerpa Delgado, formó parte de la agenda prevista durante la realización de la segunda reunión anual del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII), que se lleva a cabo del 16 hasta hoy 18 de junio en Seúl, Corea del Sur, con el objetivo de promover la industrialización e integración entre Asia con el resto del mundo.
Además, participan 2 mil invitados, que incluyen a ministros de Finanzas y gobernadores de Bancos Centrales de 77 países.
Las mayores reservas petroleras del mundo y la solidez de una empresa como Pdvsa son la carta de presentación de nuestro país para respaldar inversiones internacionales, según refirió una nota de prensa de la estatal.
Precisamente, la participación de Venezuela en la segunda reunión anual del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII) abre las puertas para el acceso a recursos, financiamiento del desarrollo y apoyo para la inversión social, lo que se puede traducir como uno de los principales beneficios a obtener.
POTENCIALES ALIANZAS
En el evento, más de 30 empresas y entidades nacionales e internacionales tendrán la oportunidad de presentar sus avances en materias tecnológica y de infraestructura en diversos sectores como: ciudad inteligente; medios de transporte; gestión de recursos hídricos; energía verde y telefonía móvil 5G.
Países latinoamericanos como Brasil, Bolivia, Chile, Perú y Venezuela son miembros de esta institución; así como Armenia, Fiji, Hong Kong, Timor Oriental, Bélgica, Canadá, Etiopía, Hungría, Irlanda y Sudán.
Venezuela reafirma su importancia en la geopolítica económica mundial con su incorporación al Banco Asiático de Inversión en Infraestructura (BAII), uno de los mecanismos económicos más influyentes de la arquitectura financiera mundial.
Esta alianza confirma la fortaleza económica y la confianza de los inversionistas en el país; además propina un duro golpe a la derecha internacional que fracasa una vez más en su intención de aislar a la nación, ya que ahora pasa a ser miembro de uno de los bancos de inversión más sólidos del planeta.