El exsecretario general del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Pedro Sánchez, renunció este sábado a su escaño en el Parlamento, para no abstenerse ante la investidura de Mariano Rajoy al frente del gobierno español.
Sánchez entregó su acta en el Congreso después de votar en contra de Rajoy en la primera sesión del proceso de investidura.
Con esta decisión, se puede mantener fiel a su posición de no a un gobierno del Partido Popular, mientras a su vez respeta la decisión del comité federal, el principal órgano del PSOE entre congresos, de virar del no a la abstención para así permitir la investidura del líder del Partido Popular.
Sánchez estuvo 10 segundos sin poder pronunciar ni una palabra, pero después agregó que era una decisión difícil para él, pero que no le podía «fallar» a los «militantes con o sin carné» que le apoyan.
Aclaró que sin embargo, no deja la política y anunció que se presentará al próximo congreso extraordinario de su partido para devolver a los militantes «un PSOE autónomo y alejado del PP».
El pasado primero de octubre, Pedro Sánchez dimitió como secretario general del PSOE después de que la dirección del partido votara contra su propuesta de celebrar unas elecciones primarias y un congreso extraordinario.