Los seis policías estadounidenses procesados por la muerte del joven afroamericano Freddie Gray, habrían negociado su libertad bajo fianza este viernes.
Cuatro de los agentes implicados, acusados de delitos como homicidio, habrían pagado 350.000 dólares, mientras que a los otros dos se les fijó una fianza de 250.000 dólares para quedar en libertad, refiere Europa Press en su portal web.
Entre los cargos a los que se enfrentan estos policías se encuentran homicidio en segundo grado, asalto, mala conducta y detención irregular, hechos por los que podrían pagar entre 10 y 30 años de prisión.
Los funcionarios aún no han sido liberados y se encuentran bajo custodia para evitar reacciones violentas de la población que se encuentra indignada por los casos de brutalidad policial contra la población afroamericana que se registran en Estados Unidos, reseña Telesur.
Este viernes, la fiscal de Baltimore, Marilyn Mosby, calificó como homicidio la muerte de Freddie Gray, ocurrida el pasado 19 de abril.
El joven afroamericano, de 25 años, murió una semana después de su detención -el 12 de abril- por lesiones en su médula espinal, producto del abuso policial.
Su muerte se suma a la ocurrida en febrero de 2012, cuando fue asesinado en Sanford, Florida, el joven Trayvon Martin, de 17 años, por un guardia de seguridad que lo consideró «sospechoso».
El 30 de abril de 2014, el policía Christopher Manney disparó 14 veces contra Dontre Hamilton, de 31 años, quien estaba desarmado. En julio, Eric Garner, de 43 años, murió luego de ser estrangulado por el policía blanco Daniel Pantaleo. Un mes después, el agente Darren Wilson asesinó al joven estadounidense Michael Brown, de 18 años, en Ferguson, Missouri, San Luis.
Habitantes de Baltimore, Nueva York, Chicago y Oakland se han mantenido en acciones de calle para rechazar el aumento de la impunidad por abusos policiales, a pesar de la fuerte actuación policial que ha derivado en 60 personas detenidas en Nueva York y la declaratoria de toque de queda en Baltimore, desde el miércoles.