¡Hola padre! Han pasado cinco años desde que nos miras desde el otro horizonte, del cual nos guías junto a Bolívar, Chávez, Willian, Eliézer, Robert y tantos otros que se completan con Fidel.
Hoy, 21 de enero, es antesala del 23 de enero, no solo un día histórico para Venezuela, pues la dictadura de Pérez Jiménez finalizó y el pueblo salió a celebrar, sin saber que sería traicionado por un pacto entre cúpulas políticas que lo sumirían en otro tipo de dictadura, esta vez de conciencia y haciéndoles creer que estaban en democracia cuando ni siquiera éramos realmente soberanos y fuerzas extranjeras controlaban nuestros recursos.
Pero todo eso ya lo sabes, lo que no sabes es que mañana reivindicaremos a Fabricio Ojeda, el mismo parlamentario que decía que «…nadie puede detener el avance de los pueblos, cuando lleva en sus mentes la fuerza de la razón y en sus manos la bandera de la justicia»; el mismo que decía que no le importaba morir, para hacer la Patria/Matria libre, pues otros recogerían su fusil y su bandera para continuar con dignidad el ideal y saber popular. Fabricio será llevado con honores y acompañado por su pueblo hasta el Panteón Nacional, junto a próceres de la Independencia y venezolanas y venezolanos importantes.
Te cuento padre que este año, el 1 de febrero, ya se cumplen 200 años del nacimiento del General del Pueblo Soberano, Ezequiel Zamora, y que nos preparamos para conmemorar a ese hombre que es una raíz importante de la Revolución Bolivariana, que a través del pronunciamiento de la ciudad de Barinas en mayo de 1859, estableció los “principios del Gobierno Federal” que hacen efectiva la visión de libertad, igualdad y justicia mas allá de lo que se podía prever en aquella época, con muchos ideales que hoy se encuentran en la Constitución de 1999 en cuyo parto estuviste involucrado y que significó un cambio revolucionario para Venezuela.
Podría continuar padre, pero la hoja se acaba, y aun no llego a hablarte de las victorias antiimperialistas tan importantes que hemos tenido, que han hecho que hayamos superado el momento mas difícil de la guerra híbrida con acento importante en lo económico y que intentó desmoralizar las tropas, sin lograrlo realmente.
Por lo pronto, vamos contigo el 25 a las 5 a la Plaza Bolívar, para una ofrenda floral frente al Libertador, luego de una misa en el Ipasme, y seguido de otro encuentro en la Casa del Frente en Altavista, acompañados de todo el que quiera recordarte, a cinco años de ti.