La crisis del dólar es un problema que realmente preocupa a los gobiernos de Bolivia y Venezuela, señaló este miércoles el embajador de Bolivia en Caracas, Jorge Alvarado, desde el Palacio Federal Legislativo, donde sostuvo una reunión con el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Fernando Soto Rojas.
«Tenemos que analizar que es lo que puede pasar, que repercusiones puede tener en nuestros países esta crisis del dólar y de qué manera podemos defendernos frente a esa crisis», declaró.
El diplomático boliviano comentó que durante la reunión se abordaron las implicaciones de la crisis económica en los Estados Unidos entre los países latinoamericanos y de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur).
El representante de la nación andina expresó que el intercambio de experiencias entre los parlamentos de Bolivia y Venezuela es fundamental para «consolidar los procesos de cambios que viven ambas naciones, para transformar el modelo económico neoliberal a uno más equitativo y justo».
Alvarado manifestó que las experiencias que viven ambos países presentan similitudes a pesar de las particularidades, por lo cual ambos parlamentos «están aprobando leyes para afianzar el modelo que construimos ambos países en beneficio del nuestros pueblos”.
Asimismo, expresó que el intercambio de experiencias y prácticas por parte de ambas asambleas, así como la consulta de las leyes aprobadas en cada país, será “muy provechoso para ambas asambleas”.
El diplomático boliviano destacó que uno de los cambios que han logrado los asambleístas de su país es que por primera vez se elija a través del voto directo a los magistrados y jueces, “es decir, todo el Poder Judicial en Bolivia será electo por el pueblo”.
“Ese es un ejemplo de intercambio que podemos compartir con Venezuela. En octubre se celebrarán estas elecciones, y sin duda es una experiencia que queremos transmitir a los hermanos venezolanos, que puedan estar, inclusive, como veedores de este proceso de elecciones”.
Sobre este punto, indicó que es necesario crear un Consejo Electoral regional que se encargue de ser observador de los procesos electorales en la región.