Según declaraciones del canciller Herald Muñoz|Chile está dispuesto a mejorar acceso de Bolivia al mar pero rechaza hablar de soberanía

El canciller de Chile, Heraldo Muñoz, aseveró este sábado que su país está dispuesto a mejorar el acceso de Bolivia al mar, pero rechazó hablar de soberanía, porque consideró que es una discusión que ya fue zanjada y que volver a ese tema sería inconducente hacia una relación de respeto y provecho mutuo.

«Chile siempre ha estado dispuesto a mejorar el acceso que Bolivia tiene el mar, eso sin lugar a dudas, lo hemos dicho, incluso ha habido conversaciones sobre la materia en el pasado (…) Pero de nuevo discutir soberanía significaría meternos en la lógica del siglo 19 y discutir todo lo que fue zanjado por el Tratado y que también hay que considerar las pérdidas que Bolivia tuvo con todos sus vecinos y eso me parece algo inconducente a una relación de respeto mutuo y de provecho mutuo», dijo a radio Fides, en una entrevista telefónica que duró aproximadamente 45 minutos.

Bolivia y Chile sostienen un juicio en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya, planteado por el primero que demanda un acceso soberano al Pacífico, en cuyas actuaciones iniciales ese alto tribunal internacional emitió un primer fallo a favor del país andino amazónico al declararse competente para tratar la demanda boliviana, que había sido observada por Chile.

Muñoz, quien en días pasados se excusó de visitar el país para ser entrevistado por el canal estatal sobre la demanda marítima boliviana, bajo el argumento de su recargada agenda, explicó que Bolivia, por el Tratado de 1904, tiene acceso al mar, que incluso va más allá debido a que Chile le otorgó «facilidades muy interesantes que se desconocen».

Por ejemplo, citó que Chile dio a Bolivia una concesión de 3,7 hectáreas en Arica para el oleoducto Arica-Sica Sica, además de 13 hectáreas para el «conducto», lo que se suma, según dijo «al más amplio y libre tránsito» que tiene por territorio y puertos chilenos, tema que; sin embargo, reiteradamente fue observado por las autoridades bolivianas y los transportistas del sector pesado y exportadores que hacen uso de esas instalaciones ya que existe incumplimiento de acuerdos e incluso abusos.

Para Muñoz lo adecuado sería apuntar a mejorar esas concesiones de Bolivia en territorio chileno y sentarse para ver -indicó- «qué otras cosas podemos hacer juntos».

De acuerdo con el diplomático chileno Bolivia no está lejos de esa postura porque -según recordó- el presidente Evo Morales, con la demanda ante La Haya intentaba «tocar» el Tratado de 1904, lo que ocurrió -detalló- fue que sus abogados «le convencieron» de plantear otra estrategia, «una ambigüedad calculada» para no mencionar el Tratado, pero al mismo tiempo demandar resultado de acceso soberano.

A contramano de esas declaraciones se encuentran las pronunciadas por las autoridades bolivianas, quienes apoyadas en la defensa del equipo jurídico en la CIJ aseveraron que se estableció que la demanda no pretende revisar el Tratado y sí busca un acceso soberano al mar.

Agregó que quizá se puedan encontrar fórmulas «imaginativas» que no toquen la soberanía, pero que apunten a mejorar el acceso, «ese desafío tenemos hoy», dijo, aunque manifestó que no está tan seguro de conseguirlo debido a que a raíz de la demanda planteada ante La Haya ambos países «nos separamos muchos más».

Consideró que tras la demanda presentada por Bolivia en 2003 ante el Tribunal Internacional la «simpatía» que existía en Chile por la causa boliviana ya no existe.

No obstante, se conoce que la causa boliviana recibió respaldo del pueblo chileno, organizaciones sociales de ese país y de otros, así como también de exmandatarios y actuales presidentes, incluso el papa Francisco se pronunció sobre el tema y consideró el pedido boliviano justo.

Chile y Bolivia estarán frente a frente en el Tribunal de La Haya una vez que comience el tratamiento del fondo de la demanda luego que el primero presente su contramemoria.

En 1825, Bolivia nació a la vida independiente con una costa de aproximadamente 400 kilómetros sobre el océano Pacífico. 54 años después, en 1879, Chile invadió y ocupó por la fuerza el territorio del departamento de Litoral, desde entonces privó al país de un acceso soberano al mar y de un territorio de al menos 120.000 kilómetros cuadrados.

FyF/ABI