La cancillería de Emiratos Árabes Unidos (EAU) confirmó este martes que la Fuerza Aérea nacional lanzó su primer ataque contra la organización terrorista Estado Islámico (EI) en Siria, luego de que Arabia Saudita también ratificó su implicación.
Un escueto comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores indica que el bombardeo ocurrió la pasada noche en coordinación con otras fuerzas participantes en las acciones internacionales para aniquilar al DAESH, acrónimo árabe de la banda extremista sunnita que opera en Iraq y Siria.
La confirmación de las incursiones de la aviación, hecha a primera hora de hoy por Estados Unidos, se centró en posiciones de los «takfiristas» (terroristas islámicos sunnitas) en la provincia siria de Al-Raqqa, y contó con la participación de otros cinco países árabes de la región.
La agencia gubernamental saudita SPA citó fuentes militares que también corroboraron la participación de la Fuerza Aérea Real Saudita en las operaciones contra el EI con el alegado fin de «ayudar a la oposición siria moderada dentro de la coalición internacional antiterrorista».
Declaraciones similares hicieron Bahrein, Jordania y Qatar, cuyos gobiernos esgrimen preocupación por la seguridad y la unidad de Siria para favorecer con armas y dinero a la oposición armada que intenta derrocar al gobierno constitucional del presidente Bashar Al-Assad.
Un portavoz castrense entrevistado por la agencia estatal bahreiní BNA apuntó que los bombardeos de la aviación de aquel reino se ejecutaron en coordinación con fuerzas aéreas de los demás países del Consejo de Cooperación del Golfo y de países occidentales aliados de Washington.